Pese a que el pasado mes de septiembre la Fiscalía General de la Nación radicó un acuerdo entre la entidad y el exsenador Otto Bula, vinculado al escándalos de corrupción de Odebrecht, para que pagara una condena de cinco años y medio, el ente acusador debió llegar a un nuevo acuerdo con el implicado, que presentará en los próximos días, debido a que el primero fue negado por un juez en noviembre.
En primera instancia, el anterior pacto llevaba a Bula a aceptar cargos por los delitos de cohecho y asociación para la comisión de un delito contra la administración pública y a pagar una condena de 66 meses de prisión, sin tener que entregar bienes propios.
Dentro de sus bienes, hay tres fincas en Córdoba que presuntamente tendrían relación con grandes capos del narcotráfico.Ahora, con el nuevo acuerdo propuesto por la Fiscalía, el exsenador debería cumplir la misma sanción en prisión, pero también estaría en la obligación de entregar una de sus fincas y la suma de 6.800 millones de pesos para cumplir con las sugerencias del juez, que en primera instancia había dicho que el primer trato no se compadecía con el daño que causó Otto Bula al estado colombiano. [single-related post_id="784671"] Además, se estableció que de ser aceptado el nuevo acuerdo, Bula deberá contar con detalles cómo fue que ayudó a la multinacional a ingresar el dinero de los sobornos a los funcionarios públicos y cómo intermedió para poder repartir las coimas.
En la Corte deberá declarar en contra de Eder Ferracuti, presidente de la Concesionaria Ruta del Sol, y Amilton Ideaki, un ejecutivo de Odebrecht. En sus versiones también deberá hablar de Eleuberto Martorelli.Dentro de sus declaraciones ya ha nombrado a más de 30 personas que están involucrados con la firma multinacional, entre los que destaca el exsenador Mario Uribe, el representante legal de Odebrecht en el país, Yesid Arocha, el que fue ministro de Agricultura en el gobierno de Álvaro Uribe, Andrés Felipe Arias, y Roberto Prieto, exgerente de la campaña de Juan Manuel Santos. Otto Bula ya confesó que a través de empresas en el exterior ingresó un millón de dólares al país para las coimas, por lo que el ente acusador lo tiene como uno de los testigos estrella de la investigación que también salpicó al exsenador Bernardo Miguel Elías, el senador Antonio Guerra y el excongresista Plinio Olano.