Cuando el Estado Islámico (EI) publicó el vídeo con la ejecución del periodista estadounidense James Foley, conmocionó la red. Sin embargo, al tiempo que se multiplicaban los mensajes de horror, espanto, pena, condolencias a la familia y fuertes críticas a los miembros fundamentalista del Estado Islámico, crecieron también las acusaciones de que el vídeo falso y escenificado. Entre alguna de ellas, porque las víctimas se mostraban tranquilas, incluso poco antes de ser decapitadas.
Sin embargo, según las revelaciones que ha hecho un periodista francés que estuvo diez meses secuestrado por el Estado Islámico en Siria y compartió celda con James Foley, esa aparente tranquilidad tendría una explicación: "Ellos no sabían que la ejecución esa vez sería de verdad", sostuvo un exsexuestrado por el Estado Islámico y quien fue liberado a principio de año.
El periodista Didier François contó que luego de su liberación que los rehenes del Estado Islámico eran sometidos a tortura psicológica haciéndoles creer una y otra vez que iban a ser ejecutados. Estos falsos ajusticiamientos se habrían repetido tantas veces a lo largo del cautiverio de los secuestrados, que tanto Foley como Sotloff y Haines, debieron suponer que la que finalmente se convirtió en dolorosamente real era un teatro más ante una cámara. Sin embargo, no fue así.
El británico David Haines, colaborador de una ONG en Siría, fue secuestrado durante 10 meses.
La tortura que los matarifes del Estado Islámico infligieron a los prisioneros incluía asimismo la escenificación de crucifixiones, y la conocida como «waterboarding», simulación de un ahogamiento a un detenido al colocarles un trapo en la cabeza y empaparlo con agua fría, impidiendo su respiración.
Otras dudas
Otra señal que internet ha surgido como supuesta prueba de la falsedad de los vídeos es que no se llega a mostrar la decapitación, sino que un fundido negro lo oculta. Según analistas en el proselitismo en las redes sociales de este tipo de grupos terroristas, esta "ocultación" de la parte más cruenta es una señal de que el Estado Islámico está aprendiendo que los vídeos con un mayor contenido en sangre y detalles macabros son menos compartidos y menos vistos en las redes sociales, por lo que llegan a menos gente.
El periodista estadounidense-israleí, Steven-Sotloff, quien fue decapitado el pasado 2 de septiembre.
En cambio, el vídeo convenientemente editado de los yihadistasfue publicado en muchos medios de comunicación.
El tamaño del cuchillo que utiliza el yihadista, supuestamente británico, también está en duda. Es casi imposible decapitar con ese tipo de arma. Sin embargo, la CIA admitió la posibilidad de que el"rapero yihadista" no fuera el que finalmente llevó a cabo la decapitación, sino que ve más que factible que se cambiara de arma e incluso de verdugo.
¿Por qué los decapitados por el Estado Islámico aparecían tranquilos?
Jue, 18/09/2014 - 12:03
Cuando el Estado Islámico (EI) publicó el vídeo con la ejecución del periodista estadounidense James Foley, conmocionó la red. Sin embargo, al tiempo que se multiplicaban los mensajes de horror,