La organización Human Right Watch (HRW) está preocupada porque los militares de EEUU no asumirán ninguna responsabilidad por los ataques a la ciudad iraquí de Mosul que se saldaron con 140 civiles muertos, comunicó hoy Belkis Wille, investigadora de esta ONG.
Las tropas iraquíes, apoyadas por la coalición internacional habían lanzado una operación para recuperar la ciudad en octubre de 2016, y su liberación fue oficializada este domingo por el primer ministro de Irak, Haider Abadi. Los iraquíes izaron la bandera del país en la orilla del río Tigris en el casco histórico de Mosul.
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Wille afirmó posterior a los hechos que "en marzo pasado un ataque de EEUU en Mosul se saldó con unos 140 civiles muertos (…) EEUU inició una investigación pero finalmente decidió que no es responsable, lo que preocupa a HRW". En su opinión, la operación de liberación de Mosul –sobre todo de su parte occidental– "costó muy caro a esta ciudad".
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"La parte occidental de Mosul fue destruida casi por completo a causa de los ataques terrestres y aéreos, y vimos una gran cantidad de civiles muertos: la ciudad pagó un precio muy caro por su liberación", indicó la investigadora.
Mosul, era el principal bastión iraquí del Estado Islámico (EI) en Irak, ocupado por los yihadistas desde mediados de 2014.
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La importancia de esta victoria, que muchos analistas anuncian como parcial, se debe especialmente a que Mosul es la tercera ciudad más grande de Irak, con más de 600.000 habitantes, después de Bagdad y Basora.
Según la prensa internacional que cubre los acontecimientos ocurridos en esa ciudad, el EI era un grupo local que al tomarse Mosul, se convirtió en un grupo de alcance global a raíz del establecimiento por parte de su líder de entonces, Abu Bakr al Baghdadi, del "califato" del Estado Islámico y del Levante, el ISIS.
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Con información de Sputnik
