La unidad venezolana de la multinacional japonesa le apuesta a un renovado proceso de exportación de autopartes fabricadas en su planta local como parte de mantener a flote sus operaciones tras la crisis económica que vive el vecino país y el estricto control de cambio.
Según el portal venezolano Analítica, la semana pasada la marca despachó su primer camión cargado con piezas manufacturadas hacia Argentina.
El mismo portal indica que la multinacional opera a una capacidad reducida por la falta de piezas e insumos, que son importados a cuentagotas por las trabas generadas por el estricto control cambiario que existe en Venezuela.
Toyota espera, paulatinamente y hasta finales de 2016, lograr vender en el mercado latinoamericano 26 clases de piezas. "Serían unos dos millones de dólares en ingresos adicionales por año, dos millones que podemos usar para comprar partes, manufacturar autos, generar ganancias y mantener la planta operando”, dijo Steve St. Angelo, presidente ejecutivo de Toyotapara Latinoamérica y el Caribe.
“Estamos sobreviviendo (…) pero hoy creo que tenemos buenas relaciones con nuestro equipo, los sindicatos, el gobierno estatal y también el gobierno nacional. Por supuesto, no siempre obtenemos todo lo que queremos o necesitamos, pero nos escuchamos y buscamos soluciones”, agregó Steve St. Angelo.
La industria automotriz venezolana ha sufrido en los últimos años un golpe económico por las distorsiones del vecino país, donde la alta inflación, la escasez de bienes y la caída del ingreso de venta de crudo generó la recesión económica.
Fuente: Analítica Venezuela
