El G20 es el grupo de países más ricos del mundo. Desde 1999 se reúnen periódicamente. Este 7 y 8 de julio volverán a estar juntos en Hamburgo, Alemania. Suelen discutir temas de economía, terrorismo, medio ambiente, comercio y energía.
Generalmente, los foros del G20 se dan entre protestas y manifestaciones de todo tipo. Esta ocasión no podía ser la excepción: miles de personas llenaron las calles de la ciudad alemana para manifestarse en contra de las distintas políticas sociales y económicas que derivan de los países más poderosos del planeta. ‘Welcome to hell’ (Bienvenidos al infierno), fue como se llamó la marcha.
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De acuerdo a la Agencia EFE “las manifestaciones contra la cumbre del G20 derivaron hoy en disturbios violentos protagonizados por grupos de la izquierda radical y antisistema, en un Hamburgo asfixiado por el cúmulo de protestas convocadas ante la cita de los líderes de las países más poderosos del mundo”.
En torno al foro hay mucha expectativa en la medida que será la primera vez que Vladimir Putin y Donald Trump se reúnan desde que este último fue elegido presidente de los Estados Unidos.
La polémica gira en torno a recientes declaraciones de Trump en las que decía que Rusia era un país que “apoyaba regímenes hóstiles como Siria e Irán”.
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“Rusia debe desistir de sus actividades desestabilizadoras en Ucrania y otros lugares y cesar su apoyo a regímenes hostiles, incluyendo a Siria e Irán, y, en cambio, debe unirse a la comunidad de naciones responsables en la lucha contra enemigos comunes y en defensa de la civilización”, fueron las duras palabras de Trump respecto a Rusia.
Además de Rusia, Trump también deberá estar frente a otro de los países a quienes más duro ha atacado: China. Se espera que la discusión entre estas dos potencias se de en torno al tema de Corea del Norte. Seguramente, Trump pedirá más sanciones al régimen de Kim Jong-un por parte del gobierno Xi Jinping.
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“Llamo a todas las naciones a afrontar esta amenaza global y a demostrar públicamente a Corea del Norte que hay consecuencias a su muy, muy mal comportamiento”, ha dicho Trump.
Las diferencias entre muchos países con el Gobierno republicano de Estados Unidos permiten augurar que será una cumbre tensa.
