Con una velocidad que nunca sobrepasó los cuarenta kilómetros y una muestra de amabilidad con todos los pasajeros que transportó, transcurrió la primera jornada del senador Antonio Navarro como taxista.
También lea, El tumbao de Antonio Navarro Wolff.
Kienyke.com acompañó al congresista de la Alianza Verde en un trayecto de su recorrido en el norte de la capital de la República, y constató su sorpresa por varios aspectos a la hora de conducir un vehículo de servicio público.
Primero, Navarro Wolff se mostró sorprendido por la movilidad fluida que presentan las principales vías de la ciudad, aunque teniendo en cuenta que aún no han ingresado a Bogotá todos los vehículos que salieron por las fiestas de fin de año.
Segundo, también le sorprendió que la imagen de los taxistas es bastante favorable y la mayoría de los usuarios con los que dialogó hablaron bien del servicio en Bogotá, a nivel general.
“Me han comentado que hay alguna persona que le falta educación, pero que el servicio es bueno. Pensé que iba a oír más críticas pero no hay tantas”, dijo.
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El senador inició su jornada a las cuatro de la mañana, y lo único que llevó consigo aparte de sus objetos personales fue una pequeña caja plástica con el símbolo de la Fundación Cardio Infantil, que es la entidad donde irá a parar el dinero que recoja en su labor de taxista hasta mediados de febrero, fecha en la que fueron convocadas las comisiones terceras conjuntas del Congreso, de la que hace parte, para debatir el Plan Nacional de Desarrollo.
Después de cumplir sus primeras ocho horas al volante, el parlamentario recogió 162 mil pesos, de un total de 15 usuarios que tomaron el servicio de los cuales debe sacar 50 mil pesos que son destinados para el dueño del taxi, y en promedio 15 mil pesos para tanquear el taxi modelo 2012 que funciona a gas.
Además, Antonio Navarro mostró orgulloso una bolsita en la que carga varios billetes y monedas para poder dar el cambio. De hecho, les envió un mensaje a todos los taxistas. “Yo me vine con una bolsita de monedas y billetes para dar el cambio y le recomiendo a todos los taxistas que lo hagan”.
Sin embargo, el senador reveló también las cosas feas a la hora de conducir taxi. Comentó sin titubeos que 150 vehículos le cerraron la vía, en su mayoría los conductores de buses y camiones.
“No he pitado ni una vez, aunque sí me ha tocado frenar por uno que otro hueco que uno ve hasta el último momento. También por los taxis y buses que se atraviesan. Sobre todo los conductores de buses son muy agresivos, se meten y hay que darles el espacio porque son más grandes, incluyendo los del Sitp”, indicó.
Sin embargo, en el tema de los huecos, Navarro también se mostró sorprendido porque según señaló, no encontró tantos huecos como se hubiera imaginado, aunque sí advirtió que hay unos bastante hondos y calles completamente dañadas.
Llevó una pequeña caja plástica con el símbolo de la Fundación Cardio Infantil, que es la entidad donde irá a parar el dinero que recoja en su labor de taxista
Hacia las once de la mañana el exsecretario de Gobierno de Gustavo Petro, desayunó en el barrio Siete de Agosto, donde los taxistas se reúnen, y pidió un caldo de costilla, papaya y un jugo de naranja.
Después de montarse al taxi reveló que no pone música mientras maneja, porque ni siquiera sabe cómo encender la radio, aunque manifestó que sí sabe cómo despinchar.
Lea también, “Taxistas tendrán salud, pensión y protección en riesgos laborales”.
Llamó la atención que el reconocido congresista manejaba sin ningún esquema de seguridad, sin escoltas ni guardaespaldas. Al respecto dijo que “hay algún nivel de riesgo, pero es razonablemente bajo”.
No obstante, el senador reveló que se acoge a la protección de la virgen del Carmen, mostrando el escapulario que lleva de la imagen divina en la palanca de cambios.
Las razones que llevaron al congresista a manejar taxi por casi un mes las reveló él mismo a Kienyke.com.
“El asunto de los taxis se volvió un tema de sensibilidad social, sobre todo en Bogotá, y queremos ver qué tan apropiada es la ley que quiere formalizar el oficio de los taxistas. Quiero también conocer qué cosas se pueden incluir en el Plan Nacional de Desarrollo en cuanto al sistema de transporte público. Es un ejercicio de campo que me va permitir más información para poder legislar bien”, señaló.
Entre los detalles que reveló el congresista de su primera jornada conduciendo, está la de una señora que se subió al taxi “y me dijo ¡ah, me tocó con usted doctor Navarro y voy tarde!" De igual manera, Navarro dijo que ha tenido que pedirle ayuda a los usuarios para escoger la mejor ruta para llevarlos a sus respectivos destinos. “Los pasajeros que me ha tocado han sido muy colaboradores”, dijo.
Varios de los usuarios que se han subido al taxi también le preguntaron por el alcalde Gustavo Petro, “y me han dado sus opiniones, unos a favor, otros en contra”.
A pesar de que apenas cumplió su primera jornada como taxista, el parlamentario ya empezó a entender las inquietudes y quejas del gremio
“Entiendo a los taxistas cuando dicen que no les es rentable meterse en los trancones, pues cada punto del taxímetro corresponde a 30 segundos si está parado el vehículo, o a 78 metros de andar, entonces esperar en un trancón 30 segundos por cada punto es una dificultad que tienen”, indicó.
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No obstante, el parlamentario señaló que no está del todo de acuerdo con la disculpa de los taxistas para no recoger usuarios, según la cual no paran cuando se va cumplir la hora para entregar el vehículo.
De otro lado, el senador aprovechó para darle un consejo a las personas que se quejan en la ciudad por los trancones. “Yo le aconsejaría también a las personas vivir lo más cerca que puedan de donde trabajan y coger transporte público”, indicó.
Navarro aseguró que no se debe seguir permitiendo la entrada a Bogotá de 80 o 90 mil carros nuevos a la ciudad cada año, “porque las calles se van atestando más de vehículos. Por eso hay que fortalecer el transporte público”, dijo.
(En Video) Las anécdotas de Antonio Navarro tras el volante de un taxi:
[youtube width="549" height="366"]http://www.youtube.com/watch?v=ARF-fKsOm1A[/youtube]
Primero, Navarro Wolff se mostró sorprendido por la movilidad fluida que presentan las principales vías de la ciudad, aunque teniendo en cuenta que aún no han ingresado a Bogotá todos los vehículos que salieron por las fiestas de fin de año.
Segundo, también le sorprendió que la imagen de los taxistas es bastante favorable y la mayoría de los usuarios con los que dialogó hablaron bien del servicio en Bogotá, a nivel general.
“Me han comentado que hay alguna persona que le falta educación, pero que el servicio es bueno. Pensé que iba a oír más críticas pero no hay tantas”, dijo.
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El senador inició su jornada a las cuatro de la mañana, y lo único que llevó consigo aparte de sus objetos personales fue una pequeña caja plástica con el símbolo de la Fundación Cardio Infantil, que es la entidad donde irá a parar el dinero que recoja en su labor de taxista hasta mediados de febrero, fecha en la que fueron convocadas las comisiones terceras conjuntas del Congreso, de la que hace parte, para debatir el Plan Nacional de Desarrollo.
Después de cumplir sus primeras ocho horas al volante, el parlamentario recogió 162 mil pesos, de un total de 15 usuarios que tomaron el servicio de los cuales debe sacar 50 mil pesos que son destinados para el dueño del taxi, y en promedio 15 mil pesos para tanquear el taxi modelo 2012 que funciona a gas.
Además, Antonio Navarro mostró orgulloso una bolsita en la que carga varios billetes y monedas para poder dar el cambio. De hecho, les envió un mensaje a todos los taxistas. “Yo me vine con una bolsita de monedas y billetes para dar el cambio y le recomiendo a todos los taxistas que lo hagan”.
Sin embargo, el senador reveló también las cosas feas a la hora de conducir taxi. Comentó sin titubeos que 150 vehículos le cerraron la vía, en su mayoría los conductores de buses y camiones.
“No he pitado ni una vez, aunque sí me ha tocado frenar por uno que otro hueco que uno ve hasta el último momento. También por los taxis y buses que se atraviesan. Sobre todo los conductores de buses son muy agresivos, se meten y hay que darles el espacio porque son más grandes, incluyendo los del Sitp”, indicó.
Sin embargo, en el tema de los huecos, Navarro también se mostró sorprendido porque según señaló, no encontró tantos huecos como se hubiera imaginado, aunque sí advirtió que hay unos bastante hondos y calles completamente dañadas.
Llevó una pequeña caja plástica con el símbolo de la Fundación Cardio Infantil, que es la entidad donde irá a parar el dinero que recoja en su labor de taxista
Hacia las once de la mañana el exsecretario de Gobierno de Gustavo Petro, desayunó en el barrio Siete de Agosto, donde los taxistas se reúnen, y pidió un caldo de costilla, papaya y un jugo de naranja.
Después de montarse al taxi reveló que no pone música mientras maneja, porque ni siquiera sabe cómo encender la radio, aunque manifestó que sí sabe cómo despinchar.
Lea también, “Taxistas tendrán salud, pensión y protección en riesgos laborales”.
Llamó la atención que el reconocido congresista manejaba sin ningún esquema de seguridad, sin escoltas ni guardaespaldas. Al respecto dijo que “hay algún nivel de riesgo, pero es razonablemente bajo”.
No obstante, el senador reveló que se acoge a la protección de la virgen del Carmen, mostrando el escapulario que lleva de la imagen divina en la palanca de cambios.
Las razones que llevaron al congresista a manejar taxi por casi un mes las reveló él mismo a Kienyke.com.
“El asunto de los taxis se volvió un tema de sensibilidad social, sobre todo en Bogotá, y queremos ver qué tan apropiada es la ley que quiere formalizar el oficio de los taxistas. Quiero también conocer qué cosas se pueden incluir en el Plan Nacional de Desarrollo en cuanto al sistema de transporte público. Es un ejercicio de campo que me va permitir más información para poder legislar bien”, señaló.
Entre los detalles que reveló el congresista de su primera jornada conduciendo, está la de una señora que se subió al taxi “y me dijo ¡ah, me tocó con usted doctor Navarro y voy tarde!" De igual manera, Navarro dijo que ha tenido que pedirle ayuda a los usuarios para escoger la mejor ruta para llevarlos a sus respectivos destinos. “Los pasajeros que me ha tocado han sido muy colaboradores”, dijo.
Varios de los usuarios que se han subido al taxi también le preguntaron por el alcalde Gustavo Petro, “y me han dado sus opiniones, unos a favor, otros en contra”.
A pesar de que apenas cumplió su primera jornada como taxista, el parlamentario ya empezó a entender las inquietudes y quejas del gremio
“Entiendo a los taxistas cuando dicen que no les es rentable meterse en los trancones, pues cada punto del taxímetro corresponde a 30 segundos si está parado el vehículo, o a 78 metros de andar, entonces esperar en un trancón 30 segundos por cada punto es una dificultad que tienen”, indicó.
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No obstante, el parlamentario señaló que no está del todo de acuerdo con la disculpa de los taxistas para no recoger usuarios, según la cual no paran cuando se va cumplir la hora para entregar el vehículo.
De otro lado, el senador aprovechó para darle un consejo a las personas que se quejan en la ciudad por los trancones. “Yo le aconsejaría también a las personas vivir lo más cerca que puedan de donde trabajan y coger transporte público”, indicó.
Navarro aseguró que no se debe seguir permitiendo la entrada a Bogotá de 80 o 90 mil carros nuevos a la ciudad cada año, “porque las calles se van atestando más de vehículos. Por eso hay que fortalecer el transporte público”, dijo.
(En Video) Las anécdotas de Antonio Navarro tras el volante de un taxi:
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