Rodrigo Guerrero, alcalde de Cali, explica la situación:
-Usted sabe que el azúcar produce mermelada, la mermelada produce azúcar y la azúcar da diabetes y la diabetes produce ceguera. Creo que muchos de ellos tienen ese problema, que por tanta mermelada les está impidiendo ver lo que estamos haciendo nosotros.
¿Están obstruyendo su administración?
Fui concejal y conozco mucho la dinámica del Concejo. Ellos tienen intereses variados, unos me apoyan, otros no me apoyan, me apoyan en un proyecto, en otro no.
Estamos pidiendo que nos autoricen darle el subsidio mínimo vital de agua a los estratos 1 y 2, son 140 mil familias de Cali que van a beneficiarse, tenemos el dinero presupuestado, ¿cómo explicarse que ellos van a decir que no? No se puede entender eso.
Ocasionalmente hay malas relaciones con algún secretario y se enturbia todo.
¿Algunos concejales están pendientes más de sus contratos que del progreso de Cali?
Se colabora con la gente de acuerdo con el plan de gobierno. Pero no tiene sentido que quienes no están de acuerdo con el POT, por ejemplo, quieran obtener privilegios de nombramientos. Eso es normal, pero hay algunos, a veces ocurre, que son de los más violentos opositores y son los que más participación burocrática quieren y eso no está bien.
Cuando nos reunimos en privado, los acuerdos se facilitan, pero en el recinto del Concejo aparecen las barras y otros intereses, las reuniones se complican.
¿Hay crisis en las relaciones alcalde-concejo?
Espero que salgamos de las dificultades, para que sean aprobados grandes proyectos para la ciudad. En educación tenemos unos proyectos bellísimos para comprarles computadores a todos los muchachos, mejorar la infraestructura.
El MIO es un proyecto estructural de la ciudad que lleva ocho años seguidos, no lo inventé, que le hemos dedicado muchísimo esfuerzo, que está a punto de salir con la colaboración del Gobierno Nacional. Es imposible que se opongan a sacarlo adelante.
