El proyecto de 'Ley Comida Chatarra' podría hundirse en el Congreso de la República por falta de trámite. El pasado 20 de mayo la Comisión Séptima del Senado lo aprobó en tercer debate, sin embargo, debe superar la plenaria antes del 20 de junio y -por ahora- no está agendada su discusión.
En virtud del articulo 81 de la ley 5 de 1992, varios congresistas presentaron una proposición para que el proyecto se se agende en el primer punto del orden del día de la plenaria del Senado para el día de mañana. Esta noche el Senado votará esa petición.
"La iniciativa de referencia construye una importante herramienta de salud pública que permitirá a los colombianos acceder a información clara, veraz, oportuna, visible, idónea, suficiente y de fácil comprensión, sobre componentes de los alimentos; a efectos de fomentar hábitos y decisiones saludables, y reducir los índices de obesidad en el país. No podemos permitir que esta iniciativa fenezca por falta de trámite en las últimas instancias de la legislatura. La sociedad colombiana espera de la Plenaria del Senado y del Congreso de la República su pronunciamiento en la formulación de un marco normativo de etiquetado frontal que responda a la necesidad de proteger la salud del consumidor y promover el bienestar nutricional", dice el documento.
Los congresistas que respaldaron la solicitud fueron: Nadia Blel, Juan Luis Castro, Nora García, Soledad Tamayo, Mauricio Gómez Amin, José Ritter López, Armando Benedetti, Angélica Lozano, Temístocles Ortega, Roy Barreras, Andrés Cristo, Rodrigo Lara, Luis Fernando Velasco, Guillermo García Realpe y Roosvelt Rodríguez.
Cabe mencionar que, este martes a través de una twitteratón, congresistas y ciudadanos en general le pidieron al presidente del Senado, Arturo Char, que agende el debate en la plenaria para que el proyecto pueda ser votado y en caso de resultar positivo dicho trámite, pasar a sanción presidencial y convertirse en ley de la República.
¿En qué consiste el proyecto?
Quiere aportar a la construcción de medidas eficientes que prevengan en la población colombiana Enfermedades No Transmisibles (ENT) como obesidad, hipertensión, diabetes entre otras, las cuales se relacionan principalmente con los malos hábitos alimenticios.
El proyecto plantea que todos los productos comestibles o bebibles clasificados de acuerdo a nivel de procesamiento que superen los umbrales establecidos por el Ministerio de Salud se deberá implementar un etiquetado frontal donde se incorpore un sello de advertencia.
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Ese etiquetado deberá ser de alto impacto preventivo, claro, visible, legible, de fácil identificación y comprensión para los consumidores, con mensajes inequívocos que adviertan al consumidor de los contenidos excesivos de nutrientes críticos.
La reglamentación de los parámetros técnicos de este etiquetado estará en cabeza del Ministerio de Salud, que debe definir la forma, figura, símbolos, textos, valores máximos, colores, tamaño y ubicación en los empaques de los productos que deban contenerlo, basándose en evidencia científica disponible.
