El mes pasado, falleció un bebé miembro de la comunidad aborigen de Borroloola, en Australia. Las autoridades locales juzgaron prudente que al recién nacido se le practicara la autopsia para determinar la causa de la muerte. Los miembros de la comunidad aborigen alegaron que la autopsia provocaría que el espíritu se escapara. El padre acudió a los juzgados para que las autoridades le respetaran el derecho de decidir sobre su hijo. Después de estudiado el alegato entre la comunidad liderada por el padre, la orden médica, y de establecer que la muerte no había sido violenta, decidieron respetar la cultura aborigen.
Alega que la autopsia podría hacer que se escape el alma
Mié, 07/12/2011 - 07:31
El mes pasado, falleció un bebé miembro de la comunidad aborigen de Borroloola, en Australia. Las autoridades locales juzgaron prudente que al recién nacido se le practicara la autopsia para determ