En medio de la crisis desatada por la situación financiera de la Universidad San Martín el gobierno presentará al congreso un proyecto de ley para darle más herramientas al Estado y pueda intervenir en emergencias como esta.
El presidente Juan Manuel Santos sugirió que una Superintendencia de Educación podría robustecer la capacidad institucional en el sector educativo.
Ante la propuesta de crear una superintendencia, KienyKe.com consultó la opinión de la excandidata vicepresidencial y experta en el tema educativo Isabel Segovia, quien señaló dos puntos clave en el tema: uno, que al Ministerio de Educación le queda muy difícil ser juez y parte en la entrega de los permisos de funcionamiento. En este sentido la creación de la superintendencia aliviaría presiones sobre el ministerio. Según Isabel Segovia, en este momento la entidad no tiene la capacidad sancionatoria, técnica ni administrativa para asumir el control que una situación como la actual requiere.
El segundo punto que Isabel Segovia resalta en el tema de la Superintendencia de Educación es el de la autonomía universitaria. Bajo esta figura los centros de educación superior tienen un amplio margen de maniobra, que es absolutamente respetable. Sin embargo, dicha autonomía advierte la especialista, no puede pasar por encima de los derechos de los estudiantes y sus padres que invierten grandes cantidades de dinero por un servicio.
En medio de los dos puntos se abre un cuestionamiento importante. Se dice que el caso de la San Martín podría compararse con el tema de Saludcoop en el sector salud. La Superintendencia de Salud no ha podido hacer mucho en esa historia. Entonces, ¿de crearse la Superintendencia de Educación podría mostrar resultados en un caso tan complejo como el de la Universidad San Martín? O en otras palabras: ¿crear otra entidad es garantía de que situaciones como esta no pasen?
