Crece la polémica desde que se conoció el traslado de Jesús Santrich a una sede de la Conferencia Episcopal de Colombia. El argumento que apela a razones humanitarias por cuenta de la huelga de hambre que inició el ex guerrillero desde el día que fue detenido no convence a los detractores. Y hasta en el interior de la Iglesia Católica hay opositores a la decisión de aceptar la solicitud de recibirlo en la institución.
La Conferencia Episcopal emitió un comunicado en el que comenta las condiciones en las que se encuentra el líder de la Farc y afirma que con la acción humanitaria no se pretende obstaculizar los procesos judiciales del detenido.
Además, explicó que se encuentra desde el pasado 10 de mayo desde las 22:00 horas en la sede de la Fundación Caminos de Libertad, "institución creada hace 20 años con la misión de dar apoyo a los programas liderados por la Pastoral Penitenciaria como son: acogida, orientación, capacitación y atención a las personas privadas de la libertad".
Pero al menos dos altos prelados se apartaron de la decisión públicamente: Monseñor Alirio López, el sacerdote más querido de la televisión por su programa Pandillas, guerra y paz; y Monseñor Pedro Mercado, presidente del Tribunal Eclesiástico de Bogotá, divulgaron sus razones en diferentes medios de comunicación y a través de sus cuentas de Twitter.
López dijo que Santrich debería estar en la cárcel y se refirió a la huelga de hambre que cumple ya 34 días: "Hacer un huelga de hambre no le da derecho a nadie de que sea trasladado a un sitio amparándose de la actitud solidaria y samaritana de la Iglesia. Esta siempre ha sido facilitadora de muchos acontecimientos pero es su responsabilidad, Santrich, usted cometió un delito, de los muchos que realizó cuando estaban en el monte".
https://twitter.com/monsealirio/status/995115001013731330
Incluso recordó varias víctimas del conflicto armado, entre ellos un niño de siete años con cáncer que suplicó ver a su papá y murió sin verlo porque estaba secuestrado por las Farc. Y a propósito de la huelga de hambre que adelanta el líder recordó a todas las personas que fallecieron por esta razón en sus manos. Le pidió no agrandar el problema y regresar a la cárcel para esperar la decisión de la extradición.
https://twitter.com/monsealirio/status/995243323345506304
Otra de las voces en contra es Monseñor Pedro Mercado, presidente del Tribunal Eclesiástico de Bogotá, que dijo que con este traslado se envía un mensaje erróneo a la sociedad, “lanza un mensaje moral erróneo a la sociedad colombiana que el delito paga".
Además aseguró que con la huelga de hambre ha chantajeado a organismos internacionales: "Santrich a través de huelga de hambre y presión internacional ha quebrantado reglas de juego".
Sin embargo, la Conferencia Episcopal explicó bajo qué términos recibió al exlíder guerrillero:
- Se cumpla cabalmente lo establecido por los estatutos de la Fundación Caminos de Libertad
- Se entienda que es un gesto humanitario y en coherencia con el principio de la iglesia de defender la vida humana
- Se respeten las decisiones de orden judicial en el ámbito nacional o internacional que se tome en relación con el caso.