Después de superar una compleja época de violencia a finales de los años 90’s e inicio de los 2000, el oriente de Antioquia se ha convertido en un foco de ecoturismo. Además de destinos como El Peñol, reconocido principalmente por su piedra de 220 metros de altura, hay otros municipios de la región como San Carlos, que aprovechan los espacios naturales para ofrecer actividades turísticas.
Conocido como la “costica dulce” del oriente antioqueño, San Carlos es un municipio de clima cálido y abundancia de agua dulce, que ha trabajado los últimos años por potenciar su desarrollo turístico. Como muestra de esto, hoy cuenta con una variada oferta de lugares de recreación ecoturística, de gastronomía y de actividades deportivas.
"Desde el punto de vista ambiental le apostamos al aprovechamiento de nuestros recursos naturales como el agua, el suelo, los bosques, la flora y la fauna, para hacer recreación responsable. Somos un municipio privilegiado, rico en aguas, y ese es nuestro mayor atributo", dijo Jáder García, secretario de gobierno de San Carlos, en diálogo con KienyKe.com.
Una experiencia ecológica
Las cascadas, sus seis ríos y más de 70 quebradas, hacen que este municipio sea un atractivo turístico por su recurso hídrico. Además, está catalogado por las autoridades ambientales como bosque húmedo tropical con pisos térmicos cálidos medios y fríos, y un clima es similar al de Medellín, entre 23 y 25 grados centígrados.
Estos espacios naturales son propicios para realizar actividades como torrentismo, camping, ciclomontañismo, caminatas, cabalgatas, parapentismo, observación de aves y pesca deportiva y natural, que son verificados y acompañados por la Oficina de Turismo del municipio, a disposición de la comunidad durante todo el año.
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El turismo ambientalmente responsable es una de las apuesta de la administración actual de San Carlos ya que se plantea como un tema que le aporta al desarrollo económico del municipio y permite promover principios de cuidado y respeto por el medio ambiente a través de la sostenibilidad de sus recursos naturales.
San Carlos, turismo para todos los gustos
Para recibir a los visitantes, el municipio le ha apostado, durante los últimos 10 años, a mejorar su capacidad hotelera. La administración municipal estima que hasta 2018 la cifra de camas llegó a 800 entre hoteles rurales y urbanos. Los precios de una noche de habitación en estos sitios están entre los $30.000 y $120.000.
“Quienes se acerquen a disfrutar de San Carlos, se van a encontrar con lugares para hospedarse verificados por estrictos controles calidad, con una gran variedad de actividades para hacer en familia, con una oferta gastronómica para todos los gustos y, lo más valioso de todo, con el carisma, la cortesía y la amabilidad de los habitantes del municipio”, resaltó el secretario de gobierno.
El municipio tiene, además, una variedad agrícola que incluye productos como café, plátano, yuca, guanábana, naranja, mandarina, zapote y piña, lo que enriquece su oferta gastronómica, que está basada principalmente en la comida típica antioqueña con la bandeja paisa y la arepa como protagonistas; comidas rápidas, y una variedad de platos relacionados con la dieta costeña destacando la comida de mar.
Llegar desde Medellín a este ‘paraíso hídrico’ tarda aproximadamente tres horas y media representadas en 151 kilómetros de distancia, y el tiquete de transporte público cuesta entre $20.000 y $25.000. Además, es vecino de municipios como Guatapé, Granada, San Rafael, San Roque, Caracolí, Puerto Nare y San Luis.
