El operar delictivo del Ejército de Liberación Nacional (ELN) se ha incrementado en las últimas semanas. El grupo insurgente se ha atribuido diferentes atentados en Colombia y recientemente anunciaron que no negociará con el gobierno de Iván Duque, pues señaló que la actual administración no tiene intención de llegar a un acuerdo.
El máximo cabecilla del ELN, Antonio García, expresó a través de un comunicado que esperarán al próximo gobierno para sentarse a dialogar, ya que el gobierno de Duque no habría dado muestras de negociar en los últimos tres años y dudan que lo haga en los próximos meses.
"Tampoco vemos, ni de manera hipotética, una actitud de parte del establecimiento por buscar una salida política al conflicto. El Estado solo contempla la desmovilización y el desarme para que todo siga igual", manifestó García.
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En ese sentido, el líder de este grupo terrorista sostuvo que será con el próximo gobierno que podrían dialogar. No obstante, dejó la puerta abierta para negociar su desmovilización con el gobierno colombiano en Cuba.
“Por ahora hay que esperar un nuevo gobierno con el que se pueda hablar, pero si este gobierno se las quiere dar de inteligente podría aproximarse a La Habana para conversar, pero eso no lo hizo durante tres años, menos lo hará en el que falta” sostuvo García.
Así las cosas, queda prácticamente descartado un proceso de diálogo entre el gobierno y el ELN, que en los últimos meses se ha atribuido diversos atentados y en ningún momento ha cesado sus acciones delictivas para llegar a un acuerdo.
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Por ejemplo, hace unos días el ELN se adjudicó el atentado a los oleoductos de Ecopetrol entre Barrancabermeja y Bucaramanga.
"Somos responsables de las acciones de sabotaje ejecutadas el pasado 12 de septiembre, contra dos líneas de oleoductos al servicio de Ecopetrol, en el corregimiento de Barrancabermeja", afirmaron en un comunicado.
Por estos atentados no se registraron víctimas mortales, sin embargo, la flora y la fauna aledaña a la infraestructura petrolera presentó graves afectaciones a causa de las detonaciones y al derramamiento de crudo, razón por la cual Ecopetrol y la comunidad hicieron un llamado al cese de estas acciones terroristas.
De acuerdo con la compañía, el hecho habría sido cometido por terceros contra el oleoducto Cira Infantas, Refinería de Barrancabermeja en el sector Paquistán, y tuvo que activar un plan de contingencia con dos brigadas de contraincendios.
