El supremacista blanco Daniel Lewis Lee, de 47 años de edad, se convirtió en el primer preso federal en ser ejecutado por el gobierno de Estados Unidos después de 17 años.
Su ejecución fue aplazada varias veces por distintas batallas y obstáculos legales. Esta semana, una jueza frenó el procedimiento al dictaminar que la pena capital mediante inyección letal va en contra de la octava enmienda de la Constitución, la cual establece que "no se puede someter a los presos a castigos crueles o inusuales".
Sin embargo, el gobierno del presidente Donald Trump apeló a la decisión judicial y ganó el pleito. A mitad del año pasado, el mandatario solicitó a través del fiscal general William Barr la necesidad de reanudar la aplicación de la pena de muerte en toda la nación con el fin de que las víctimas de los crímenes "más horribles" tengan justicia.
La Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos decidió, con una apretada votación de 5-4, darle paso a la pena capital. Por esa razón, Daniel Lewis Lee fue ejecutado por inyección letal en una prisión federal de Indiana. Lo declararon muerto hacia las 8:07 a.m. del martes 14 de julio de 2020.
"He cometido muchos errores en mi vida, pero no soy un asesino (...) están matando a un hombre inocente", dijo el convicto en su declaración final ante las autoridades.
Ningún prisionero federal había sido sometido a la pena de muerte desde 2003 en Estados Unidos. La ejecución de Daniel Lewis Lee, que estaba programada en un inicio para el lunes 9 de diciembre de 2019, fue frenada en ese momento por una decisión emitida desde el Tribunal Supremo que se negó a restaurar la pena de muerte a nivel federal.
¿Por qué Daniel Lewis Lee fue condenado y ejecutado?
Daniel Lewis Lee fue condenado en 1999 por asesinar a William Muller, a su esposa Nancy Muller, y a su hija Sarah, de ocho años.
Todo ocurrió en Tilly, Arkansas, exactamente en 1996. Lewis Lee y Chevie Kehoe, líder de una banda de supremacistas, ingresaron a la residencia familiar con la intención de robar armas y dinero en efectivo.
Sin embargo, la familia Muller se encontraba en la vivienda, así que los dos criminales decidieron dispararles, meter sus cabezas en una bolsa, cargarlos de piedras y lanzarlos a un pantano con el fin de eliminar la evidencia.
Earlene Branch Petersen, madre de Nancy Muller, le pidió al gobierno de Donald Trump que frenara la pena de muerte en contra de Daniel Lewis Lee, pues aseguró que esto no le iba a devolver a su hija. En cambio, pidió que fuera condenado a cadena perpetua, cosa que no ocurrió.
