
El Deportivo Cali sigue profundizando su crisis. A la falta de recursos económicos, los atrasos en los pagos a sus jugadores, las posibles sanciones por parte de la FIFA y el Ministerio del Deporte, y los malos resultados deportivos, ahora se suma la fuerte condena que recae sobre su presidente, Humberto Arias.
Según información revelada por el periodista Alejandro Pino Calad, Arias fue condenado por el delito de fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones agravado, en el marco de un caso relacionado con homicidio.
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La sentencia fue impuesta por el Juzgado Tercero Penal del Circuito Especializado el pasado 28 de febrero. Esta decisión reviste una gravedad considerable, no solo por la implicación penal para Arias, sino por el impacto institucional que representa para el Deportivo Cali, uno de los clubes más importantes e históricos del fútbol profesional colombiano.
La condena recibida por el alto funcionario de la institución es de 19 años de prisión. La sentencia incluye una inhabilitación para ejercer funciones públicas por el mismo tiempo establecido en la pena.
Arias asumió la presidencia del club en el año 2024. Ahora, ha apelado la decisión ante el Tribunal Superior de Cali mientras el proceso sigue su curso. Entre tanto, diversos sectores ya le hacen pedido al Ministerio de Transporte que intervenga en el caso.
Esta noticia pone en vilo el futuro del club, que actualmente se encuentra en la búsqueda de inversionistas que le permitan mejorar su situación financiera y rescatar la institución, que está al borde de enfrentar sanciones que podrían representar un golpe severo para el deporte en Colombia.
Además, la difícil situación del equipo ‘azucarero’ ya está afectando al plantel femenino, que lidera la tabla de la liga profesional y lucha por el título. Se ha conocido que las jugadoras no entrenan desde hace cinco días debido a la falta de pago de sus salarios.
Según versiones conocidas, el club les adeuda al menos cinco quincenas, es decir, dos meses y medio sin recibir remuneración por sus servicios. Ante esta situación, el equipo femenino estaría ejerciendo presión para que se les pague lo adeudado, con la promesa de continuar siendo competitivas en la Liga Femenina.