¿Cuántas empresas quieren que sus empleados estén bien de salud? Las pausas activas y los controles médicos se han vuelto tan comunes como oportunos. La razón tiene que ver con la intención de los jefes de tener trabajadores sanos, tanto por cuestiones humanas como por el costo de los seguros y pagos mensuales a las empresas prestadoras de servicios médicos.
El portal The Atlantic publicó un estudio de la revista American Journal of Preventive Medicine, en el que se encontró que los trabajadores con más de 40 horas laborales por semana y con cargas laborales muy hostiles están más propensos a ser obesos.
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Resulta evidente que se produzcan este tipo de conclusiones teniendo en cuenta que pasar largas horas sentado al frente de un computador puede quitar espacio para realizar actividades deportivas.
Pero, sorprendentemente los investigadores encontraron que ciertas industrias y ocupaciones se relacionan directamente con mayores tasas de obesidad.
Los autores del estudio utilizaron la Encuesta Nacional de Salud del 2010 en Estados Unidos. Relacionaron estos datos con el peso y la altura de la población, así como los empleos y la tasa de ocupación.
En las categorías de industria, salud, manufactura, asistencia social, transporte, almacenamiento, información, servicios públicos y administración pública, están los mayores índices de obesidad.
The Atlantic señala que solo la industria de administración pública de la salud (asistencia social), tiene las tasas de obesidad más altas de lo normal. Los autores del estudio ajustaran los factores como raza, género y conductas de salud ligadas al tabaquismo.
La Asociación para la Prevención de la Enseñanza y la Investigación dice que las personas que trabajan en administración pública de la salud tienen mayor riesgo a la gordura. "Es posible que estas personas se sienten detrás de un escritorio por muchas horas al día con lo que se podría conducir a un aumento exagerado en el peso. Resulta impactante saber que las personas que trabajan en consultorios médicos sufren de altas tasas de obesidad aún cuando en esos espacios se predica una vida saludable", señala el informe.
A partir de estos datos, los investigadores analizaron otras variables de empleo:
El 40 por ciento de los policías, guardias de seguridad, y jefes de centros reclusorios tuvieron una exposición más cercana a la obesidad. Pero en este item y luego de ajustar factores demográficos, de nuevo los oficinistas, ingenieros y trabajadores de servicios sociales tuvieron inusualmente altas tasas de gordura.
El gráfico anterior representa datos muy generales de un país en el que una de cada tres personas es obesa."La ingeniería es una descripción muy amplia y el campo de la administración pública y oficinas abarca a todos los trabajadores, desde los recepcionistas hasta los cajeros de bancos".
En relación a la categoría de trabajadores de servicios sociales, se incluyeron relacionistas públicos, empleados de salud mental y protección de niños, lo que se conoce como asistencia sanitaria.
Finalmente los autores del estudio creen que esta tendencia se puede dar por las características de los puestos de trabajo y el sedentarismo, algo que probablemente contribuye a la obesidad. Los médicos podrían estar de pie todo el día pero los recepcionistas y el personal de facturación están detrás de los escritorios, ordenando cartas y contestando el teléfono.
(Leer también: Descubren el gen de la gordura)
Una anterior Encuesta Nacional de Salud encontró que la categoría profesional "Servicios de salud", que incluye salarios más bajos para el personal de oficina, tuvo una mayor tasa de obesidad si se compara con los empleos que ocupan los médicos o enfermeras.
El salario es parte importante si se trata de relacionar a la gordura con el empleo. Si bien es cierto que el trabajo que se adquiera puede afectar a su cuerpo, dependiendo de lo que gane también tendrá la posibilidad de ser declarado con sobrepeso.
Con información de The Atlantic
El 40 por ciento de los policías, guardias de seguridad, y jefes de centros reclusorios tuvieron una exposición más cercana a la obesidad. Pero en este item y luego de ajustar factores demográficos, de nuevo los oficinistas, ingenieros y trabajadores de servicios sociales tuvieron inusualmente altas tasas de gordura.
El gráfico anterior representa datos muy generales de un país en el que una de cada tres personas es obesa."La ingeniería es una descripción muy amplia y el campo de la administración pública y oficinas abarca a todos los trabajadores, desde los recepcionistas hasta los cajeros de bancos".
En relación a la categoría de trabajadores de servicios sociales, se incluyeron relacionistas públicos, empleados de salud mental y protección de niños, lo que se conoce como asistencia sanitaria.
Finalmente los autores del estudio creen que esta tendencia se puede dar por las características de los puestos de trabajo y el sedentarismo, algo que probablemente contribuye a la obesidad. Los médicos podrían estar de pie todo el día pero los recepcionistas y el personal de facturación están detrás de los escritorios, ordenando cartas y contestando el teléfono.
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Una anterior Encuesta Nacional de Salud encontró que la categoría profesional "Servicios de salud", que incluye salarios más bajos para el personal de oficina, tuvo una mayor tasa de obesidad si se compara con los empleos que ocupan los médicos o enfermeras.
El salario es parte importante si se trata de relacionar a la gordura con el empleo. Si bien es cierto que el trabajo que se adquiera puede afectar a su cuerpo, dependiendo de lo que gane también tendrá la posibilidad de ser declarado con sobrepeso.
Con información de The Atlantic
