El 13 de mayo la Iglesia Católica celebra el día de la Virgen de Fátima, una fecha que recuerda que desde el 13 de mayo al 13 de octubre de 1917 la virgen María se le apareció seis veces a tres pastorcitos, Lucía, Francisco y Jacinta, en el lugar conocido como Cova da Iria, cerca de Fátima, en Portugal.
Asimismo esta fecha tiene un profundo significado en la historia del Vaticano, pues un 13 de mayo pero de 1981, el papa Juan Pablo II sufrió un atentado en la Plaza de San Pedro que por poco le cuesta la vida.
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La relación de estas dos fechas para el mundo del catolicismo no es una coincidencia. Pues en medio de lo que pasó hay un secreto que por más de 80 años la Iglesia decidió ocultar.
Los misterios de los tres pastorcitos
En 1917 tres niños que vivían en un pueblo de Portugal contaron que hablaron con la Virgen María. En esa conversación milagrosa se les reveló tres misterios de lo que ocurriría en el mundo.
Lucía dos Santos y sus primos Jacinta y Francisco Marto, son esos pastorcitos eran los portadores de esas profecías divinas.
Lucía en 1941 reveló dos de estas profecías pero mantuvo una en total secreto. El primer misterio hablaba de "un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra. Hundidos en este fuego [estaban] los demonios y almas", que es uno de los relatos que deja en firme la existencia del infierno para esa religión.
El segundo misterio era una tarea que encomendaba la Virgen María para salvar almas, en lo descrito por Lucía, también habla de Rusia.
"Vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón, y a la comunión reparadora en los primeros sábados. Si atendieran a mis pedidos, Rusia se convertirá y tendrán paz. Si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia, los buenos serán martirizados".
El tercer misterio permaneció en secreto hasta el año 2000
La muerte de un obispo vestido de blanco
El tercer misterio de Fátima lo conocía la Iglesia desde un principio pero por petición de Lucía no se hizo público.
El 13 de mayo cuando el papa Juan Pablo II recorría la plaza de San Pedro de la Ciudad del Vaticano en su jeep blanco, Mehmet Ali Agca disparó contra él cuatro veces.
"La figura blanca se inclina hacia el lado izquierdo. Lleva la mano derecha hacia al abdomen. Suena otro disparo. La figura se inclina un poco más aún. Suena otro disparo. El Papa mira en su mano derecha la sangre que fluye", relató un corresponsal del medio ABC de España.
Las graves heridas que recibió el sumo pontífice hizo que perdiera bastante sangre y minutos después entraba, consciente, en el quirófano de la Policlínica Gemelli.
El papa sobrevivió a este atentado y un año después viajó Fátima por primera vez y ante su santuario le dio las gracias a la Virgen por haber sobrevivido y depositó en su corona, como ofrenda, una de las balas que lo hirió.
Sin embargo el secreto de Fátima estuvo guardado por muchos años más luego de este atentado.
Fue hasta el 13 de mayo de 2000 cuando el Vaticano que seguía bajo el mando de Juan Pablo II decidió revelar el tercer misterio.
El portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro-Valls, señaló que Juan Pablo II releyó, al día siguiente de sufrir el atentado, el 13 de mayo de 1981, a manos del turco Alí Agca, la profecía, y "para él, el sentido estuvo claro". Desde entonces, el Papa siempre ha sostenido que la Virgen de Fátima había desviado las balas.
¿Pero qué era lo que decía la profecía? El misterio escrito por Lucía, contaba como la Virgen María les describía un ángel con una espada de fuego en la mano izquierda pidiendo penitencia con una fuerte voz. Y al Papa con varios clérigos escalando una montaña y siendo matados después por las balas y flechas de soldados.
"Bajo los dos brazos de la cruz estaban dos ángeles. Cada uno con una jarra de cristal en las manos, recogiendo en ellos la sangre de los mártires".
