Nikolas Cruz es un exalumno del colegio donde mató a 17 personas el Día de San Valentín, entre estudiantes de 14 y 17 años, dos profesores y un entrenador de fútbol. El día de su audiencia llegó rodeado del brazo de su abogada como para protegerlo ante la jueza Kim Theresa Mollica. Se declaró culpable, aceptó todos los cargos -de homicidio de 17 personas- y escuchó después de una breve audiencia su sentencia: estaría detenido sin posibilidad de fianza en una celda de máxima seguridad hasta su juicio, y deberá llevar puesto un chaleco negro especial para evitar que se suicide, según explicó otro de sus abogados.
La escuela de Marjory Stoneman Douglas está en la ciudad de Parkland, en Florida y está de luto. Cruz está triste y arrepentido, según su abogada, Melisa McNeill, que asegura que el presunto asesino es consciente de lo que ha hecho, pero es "un ser humano, es un niño roto, y está triste. El señor Cruz siente el mismo dolor. Si no tienes ese apoyo, el sistema de apoyo que necesitas, el amor, la amabilidad que todos los niños necesitan, entonces cometes errores y eso afecta quien eres. Y luego, si tu cerebro no se ha desarrollado, no puedes manejar estas cosas”, dijo la abogada McNeill.
Otro de sus defensores también apeló a sus presuntos desórdenes mentales. “Este joven está profundamente perturbado. Tiene una enfermedad mental muy marcada; vamos a analizar la posibilidad de autismo de que hemos escuchado. Estamos tratando de salvar la vida de este joven”, afirmó el abogado Gordon Weekes. La estrategia de sus abogados es que no reciba la pena de muerte y que sea considerado como “mentalmente no sano” para que cumpla su condena en una institución psiquiátrica.El señor Cruz siente el mismo dolor. Si no tienes ese apoyo, el apoyo que necesitas, el amor, la amabilidad que todos los niños necesitan, entonces cometes errores y eso afecta quien eres. Y luego, si tu cerebro no se ha desarrollado, no puedes manejar estas cosas.
Paralelamente, la fiscal general de Florida, Pam Bondi, está segura de que los abogados fiscales del estado pedirán la pena de muerte.
Este adolescente de 19 años será juzgado como adulto por un jurado conciencia y dependerá del juez en última instancia imponer la pena capital si el veredicto del jurado es unánime.
El estado de Florida reinstauró la pena capital en diciembre de 1972, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte, y desde entonces, 95 personas han sido ejecutadas, según el Departamento Correccional de Florida.
La Corte Suprema dictaminó en enero de 2016 que el sistema de pena de muerte de Florida era inconstitucional, porque se consideró en su momento que menoscababa la importancia del jurado frente al juez a la hora de tomar la última decisión. Por eso, la importancia que toma ahora el hecho de que el jurado recomiende la pena de muerte, y lo haga de forma unánime, explicando los motivos por los que se requiere ese castigo extremo.
La estrategia de los abogados para salvar a Cruz de la pena de muerte será tratar de demostrar que no está mentalmente sano, presentando pruebas claras y convincentes. El acusado sería entonces juzgado por los crímenes y, una vez se determinara su culpabilidad, se consideraría si está mentalmente sano o si debe ser considerado no culpable por motivos médicos. El resultado en ese caso podría ser una sentencia a cadena perpetua, pero a cumplir en una institución psiquiátrica.
Como Cruz es mayor de edad, la Fiscalía podría rechazar la propuesta del acuerdo y pedir para él la pena máxima, pero no se ha informado si el estado aceptará o no, la oferta hecha por Cruz, quien en su comparecencia ante los investigadores del caso dijo haber escuchado voces en su cabeza, a las que definió como demonios, que le dieron instrucciones sobre cómo debía ejecutar su matanza. Un fiscal estadounidense representando al estado de Florida presentó formalmente este jueves cargos por 17 asesinatos con premeditación contra, Nikolas Jacob Cruz, de 19 años, y exalumno del colegio, responsable por la matanza en una escuela secundaria, producida el miércoles 14 de febrero. Cruz había sido expulsado por problemas de disciplina. Cruz ingresó a la cárcel del condado de Broward, luego de ser interrogado por autoridades estatales y federales. Además de las 17 muertes registradas hubo otras 15 personas que resultaron heridas en el tiroteo, mientras que el joven de 19 años fue detenido en las inmediaciones de la propia escuela momentos más tarde de la masacre. El año pasado había adquirido el fusil luego de aprobar el examen de antecedentes. Con esta arma fue que provocó la masacre en el colegio secundario Marjory Stoneman Douglas, en Parkland, Florida. En redes sociales, Cruz publicaba con frecuencia su obsesión por las armas de fuego y cuchillos. Además los excompañeros de colegio afirmaron que tenía un comportamiento agresivo que terminó generando su salida de la institución educativa. Nikolas Cruz es huérfano, su madre murió el año pasado y su padre hace cuatro años; es una persona solitaria que trabajó en una tienda "todo a dólar", se unió al programa escolar de preparación de reservas para las fuerzas armadas y publicaba fotografías de armas en Instagram. Al menos un estudiante dijo que sus compañeros de clase bromeaban de que Cruz sería “el que dispararía dentro de la escuela”. Gracias a la legislación de Florida, que permite que las personas mayores de edad puedan adquirir armas de fuego, el joven, de 19 años, pudo comprar el año pasado de manera legal un fusil semiautomático AR-15, la versión civil del M-16 militar.