El Juzgado 23 Penal Municipal de la ciudad de Medellín (Antioquia) sentenció a 38 meses y 15 días de prisión a Jeisson de Jesús de la Cruz Sandoval, el hombre que roció alcohol y le prendió fuego a su novia de 22 años de edad.
Dicha sentencia en contra del sujeto de 26 años se da luego de una aceptación de cargos por el delito de violencia intrafamiliar en contra de su pareja Michell Yurimari Gelvez Rojas, de nacionalidad venezolana.
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Los hechos que motivaron la condena ocurrieron en el barrio Manrique de Medellín, el pasado 24 de noviembre de 2020, cuando Jeisson de Jesús de la Cruz Sandoval le roció alcohol y luego le prendió fuego a su novia.
ras la agresión, el propio victimario llevó a la víctima hasta un centro asistencial. Michell Yurimari Gelvez sufrió quemaduras de segundo grado entre el 10 y el 19 por ciento de su cuerpo y recibió una incapacidad de 25 días.
El hombre que roció alcohol y le prendió fuego a su novia se presentó ante la Fiscalía el mismo día de los hechos, pero, según el ente investigador, no fue capturado en esa oportunidad porque no existían suficientes elementos materiales probatorios para la imputación de cargos ni hubo flagrancia.
Varios días después, cuando se obtuvo la orden de captura, el procesado fue aprehendido y no se allanó a los cargos imputados por un fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata (URI). Sin embargo, después los aceptó y este miércoles 3 de febrero se conoció la condena en su contra.
A la cárcel hombre que habría abusado de su hijastra
En otras noticias judiciales, por el delito de acceso carnal violento agravado en concurso homogéneo sucesivo, fue capturado y judicializado un hombre que presuntamente abusó por varios meses de su hijastra en el año 2018.
El investigado no aceptó los cargos que le imputó una fiscal del Centro de Atención a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas) de la Seccional Quindío, y fue afectado con medida de aseguramiento en centro carcelario por un juez de control de garantías.
Los hechos materia de investigación ocurrieron en Calarcá (Quindío), en la residencia de la víctima, quien para la época tenía 11 años. Aparentemente, el hombre inició con tocamientos libidinosos a la niña, pero luego la habría obligado a tener relaciones sexuales con él por lo menos unas siete veces y la hacía planificar para que no quedara embarazada.
Ante las supuestas amenazas del hombre a la menor, de que su mamá no le creería si le contaba, la niña decidió decirle todo a una profesora del colegio quien denunció el hecho.
