Gateando hasta Marte

Mar, 29/11/2011 - 02:47
Me gusta pensar que el primer hombre (o mujer) que pisará la superficie de Marte ha nacido ya, y está por allí en algún lugar del mundo sin sospechar siquiera el alto honor que le espera. A veces
Me gusta pensar que el primer hombre (o mujer) que pisará la superficie de Marte ha nacido ya, y está por allí en algún lugar del mundo sin sospechar siquiera el alto honor que le espera. A veces voy aún más lejos y pienso que de hecho esa persona soy yo, el primero colombiano en el espacio, pero de inmediato recuerdo las duras pruebas físicas que habría de soportar si pretendiera mantenerme en el espacio durante al menos tres años que duraría una misión al Planeta Rojo, el reto psicológico que ello implicaría y la enorme carga personal de dejarlo todo por una odisea que bien puede terminar en el vacío, sin contar con que los astronautas de hoy deben ser europeos, americanos, rusos o chinos, y regreso de un golpe a la realidad contundente de mi futuro en el planeta Tierra. Lo más probable es que esta persona, si existe, sea aún un bebé que primero tendrá que aprender a mantenerse en sus dos pies antes de intentar la aventura marciana, y aprender a agarrar el biberón antes de probar la comida deshidratada de los astronautas.  Los planes más optimistas de llevar humanos a Marte están planeados dentro de 25 años, y sería una excepción dentro del ámbito de las misiones espaciales que esos plazos se cumplieran. Lo mas probable es que sean 35 años, ya que en esta época capitalista no existe ninguna carrera contra los comunistas para llegar primero, y los chinos aún están lejos de ser un competidor de peso. Neil Armstrong tenia 38 años cuando dejó impresa su huella gringa en el polvo lunar. Si asumimos que el primero en pisar el suelo color cobre de los áridos y helados desiertos marcianos tendrá la misma edad cuando lo haga, entonces nuestro héroe ha de andar por los tres años. Miren a su alrededor, podría tratarse de su hermanito o del tierno bebé de la vecina, ese que los desespera de con su llanto estridente en las mañanas: el grito ensordecedor de la predestinación La exploración de Marte es más que el capricho de unos cuantos científicos locos, y nuestro deseo de indagarlo es un descendiente directo de los sueños quiméricos de los exploradores fenicios de la Antigüedad y europeos del siglo XVI, quienes se hicieron a la Mar sabiendo menos sobre las aguas y las tierras que encontrarían de lo que sabemos nosotros sobre el planeta rojo. Sabemos que Marte tuvo un pasado de agua, con considerables caudales bajando por las laderas de algunos de sus cráteres y con abundante hielo en sus polos. Sabemos que hoy en día tiene un clima complejo con tormentas de arena, vientos moderados y algunas nubes, y conocemos la composición química de su suelo. En el presente, pequeños canales de agua subterráneos podrían estarse abriendo paso entre las rocas de Marte y si en verdad éste es el caso, podemos incluso soñar con la posibilidad de vida microbiana pasada o presente en la superficie de nuestro vecino cósmico. Intentar desentrañar sus secretos es antes que nada un intento por entender el origen de la vida, nuestro origen. [caption id="" align="aligncenter" width="600" caption="La sonda "Curiosidad" explorará las rocas marcianas en busca de evidencias de vida."][/caption] La exploración de Marte acaba de tomar un nuevo aire con el lanzamiento por parte de NASA del Laboratorio Científico de Marte (MSL, por sus siglas en inglés), cuyo alias, Curiosidad, es la expresión más fiel de lo que esta misión implica para la Humanidad. Cuando amartice, dentro de 8 meses y medio, iniciará el más extenso y detallado estudio de los minerales marcianos que se haya hecho hasta el momento y nos dará pistas sobre las condiciones pasadas en Marte, y las razones que lo llevaron de un pasado tan anegado como las calles de Bogotá en invierno a un presente seco como los desiertos fríos de la Patagonia. El camino no ha sido fácil: desde el punto de vista técnico, la probabilidad de fallar siempre es alta (que lo digan los rusos, que han perdido recientemente su propia misión al planeta rojo); desde el punto de vista político, nos sigue costando convencer a los que ostentan el poder que la inversión en este tipo de proyectos implica una visión a largo plazo de nuestro destino como Humanidad, más allá de los réditos políticos obtenidos en las elecciones cada cuatro años. Pero algún día caminaremos sobre Marte y construiremos allí nuestras bases, y los tropiezos que aún nos faltan poco importan por ahora para la persona que tendrá el honor de hacerlo primero, ese que sigue jugando sin inmutarse por los rincones de su casa, esperando que llegue la hora de su destino. Twitter: @juramaga
Más KienyKe
Esto es lo que se sabe sobre las alteraciones en la movilidad este jueves 12 de diciembre en la capital colombiana.
El mandatario aseguró que los ajustes por el hundimiento de la reforma no los pagará el pueblo.
La reconocida presentadora será el reemplazo de Carlos Calero en este rol. Además, estará acompañada de Melina Ramírez.
Estados Unidos señala que las disidencias de las FARC y el ELN siguieron "cometiendo actos de terrorismo en Colombia y Venezuela".