"No está mal ser bella; lo que está mal es la obligación de serlo". Susan Sontag
Al ver esta frase se me vinieron a la mente todas esas mujeres que he conocido en mi vida y que han sido víctimas de los señalamientos de toda una sociedad por no ser el prototipo de mujer que está estandarizado en quien sabe qué sitio del mundo. Quién sabe si me equivoco, pero hasta ahora no conozco el primer organismo de estandarización de belleza que obligue a las mujeres a ser iguales o que tengan que ser “bellas” ante los ojos de alguien específico. Toda mujer es bella, una frase tan desgastada, ¿pero qué culpa?, es verdad, la gordita, la flaquita, la blanca, la negra, todas son una manera diferente de ver la vida, ninguna tiene por qué someterse a cambios que pueden afectar su salud física y mental; cada vez es mas común encontrar historias de mujeres que se realizan múltiples operaciones estéticas para parecerse a una celebridad o simplemente para que en la calle no se burlen de ella, no es justo! Probablemente estas mujeres no sean culpables de las consecuencias, sino la sociedad que las empuja a ser personas que no son realmente por medio del rechazo, la exclusión y las piedras que les ponen en el camino para darle paso a figuras plásticas que no aportan nada a la sociedad.