¡Güenas las tengan! Decir que Bogotá tiene un sistema de transporte que raya en lo catastrófico y lo endemoniado, pues no es algo novedoso, ni mucho menos. Es cierto que el servicio público no ofrece ninguna clase de garantías en materia de seguridad o calidad. No creo que exista el menor requisito de urbanidad y buenas costumbres en las empresas transportadoras del país para contratar sus conductores.
Ya sé que generalizar es un asunto de sumo cuidado y sé que debe haber conductores muy correctos y afables, pero no recuerdo a muchos de ellos que me hayan recibido con un saludo cordial al arribar a su vehículo de trabajo. Y es que hay mucho guache tanto conductor como usuario. Existen muchas variaciones de esta especie única que desafortunadamente no se tiene la esperanza (Gómez) que sea una especie en vía de extinción. En el país existen especies como el guachitaxista, el guachibusetero, el motoguache, el cicliguache, el flotiguache, partuculiguache (carro particular). Pero como dije no es un problema de conductores. Existe también el usuariguache.
Hace unas semanas pudimos ver por internet el aterrador video de una pareja que terminó atropellada por un bus por tratar de colarse en Transmilenio, matando al señor y dejando herida a la señora. En el video se puede ver que el hombre al verse alcanzado por el vehículo, en un último esfuerzo sobrehumano y en un acto de amor, empuja a su esposa para salvarle la vida mientras unos segundos después el articulado impacta en la humanidad del hombre, no sin antes dispararlo varios metros de la carretera y causarle la muerte. ¿Cómo se puede superar una pérdida como esa? ¿Cómo entender que esa persona con la que estaba almorzando o estaba haciendo compras, ya no está? ¿Cómo digerir una ausencia tan de sopetón? Es para volverse loco.
Hay mucho usuariguache en Colombia colándose por todo lado y valiéndose de artimañas para no pagar y creer que son muy inteligentes por ganarle al sistema. Pero la verdad es que esas artimañas causan muertes y heridos que no deberían ocurrir. Por ahí yo leía un artículo que debatía la posibilidad que Colombia fuera una sociedad que estuviera lista para ser educada. Y con hechos como estos, no cabe la menor duda que la respuesta es negativa. Es verdad que nos falta mucho en temas como la convivencia y la cultura ciudadana, pero ¿cómo enseñarle física cuántica a un recién nacido?
¿Qué hacer con los que se colan? Más allá de las multas y otros correctivos, yo creo que la medida más sensata es la de catalogar esa actividad como malsana para nuestra sociedad. Desaprobar este tipo de comportamientos. El mensaje principal es el de aislar a este tipo de individuos que ponen en riesgo su vida y la de los demás. Por el amor a vishnú, a sidarta gautama, a ganesha o al que sea,sea legal, la vida vale, NO SE COLE!
@nicolasonte
!No se cole!
Mié, 20/05/2015 - 11:37
¡Güenas las tengan! Decir que Bogotá tiene un sistema de transporte que raya en lo catastrófico y lo endemoniado, pues no es algo novedoso, ni mucho menos. Es cierto que el servicio público no of