Tener una
piel radiante puede ser muy costoso, entre el dermatólogo, los productos y los tratamientos especiales. La piel es el mayor sistema de nuestro cuerpo; además, inconscientemente, es una de las partes en que más nos fijamos.
Los tratamientos caseros son una manera práctica y natural de cuidarla, sin maltratarla con el uso de químicos. Estas recetas se pueden hacer una o dos veces por semana para asegurarnos de limpiar los poros e hidratar nuestro cutis.
Exfoliante de avena
- Avena
- Leche de almendras
- Miel
Mezcla 5 cucharadas de
avena con un poco de
leche de almendras tibia y 1 cucharadita de
miel. Aplicar en el rostro con suaves masajes circulares y dejar actuar 15 minutos. La avena tiene excelentes propiedades nutritivas para la piel, por ello se utiliza tanto en cosmética (cremas, jabones, etc). Este cereal es magnífico para pieles con
alergias, psoriasis, dermatitis y cutis seco.
Esta mascarilla exfoliante es muy suave con la piel, asimismo la avena ayuda a combatir el
acné y evitar la deshidratación de la piel; como toda exfoliación elimina células muertas e impurezas. Por su parte, la leche de almendras previene la
aparición de ojera, bolsas y líneas de expresión alrededor de los ojos. También le regresa suavidad y elasticidad a la piel; además
hidrata y aclara la piel.
Incluso se puede utilizar la leche de almendras como
desmaquillador por su gran capacidad limpiadora. Esto ayuda a regenerar epidermis y protegerla contra los radicales libres; la leche de almendras estimula la producción de colágeno y elastina que son fundamentales para un rostro joven y firme.
La miel en cambio tiene propiedades antibacterianas. Es un increíble humectante natural, clave para mantener una tez sana y radiante; es excelente para piel seca pero sirve para todo tipo de piel ya que posee propiedades anti inflamatorias, antibióticas, nutritivas y regeneradoras.
Mascarilla de tomate
Especial para piel con acné
Pueden utilizar rodajas de
tomate maduro o machacarlo para formar un puré. Preferiblemente utilizar esta
mascarilla caliente (tibio). Aplicar en el rostro y dejar actuar por lo menos 20 minutos y luego se retira con abundante agua. Este remedio nutre, refresca y purifica los poros.
El tomate ayuda a recuperar la piel después de una
quemadura. De igual forma tiene propiedades astringentes que cierran los poros y ácidos esenciales que
combaten el acné. Esta hortaliza es rica en vitamina A y C e igualmente posee minerales como hierro, fósforo, calcio, magnesio, zinc, cobre, potasio y sodio.
Compresas frías de perejil
- Agua de arroz
- Hojas de perejil
Licuar media taza de agua de
arroz con un puñado de hojas de perejil. Dejar enfriar en la nevera un rato y aplicar en el rostro. Dejar actuar 20 minutos y retirar. Si lo prefieren se puede colar y usar como tónico.
Ya hemos hablado antes de las maravillas del arroz para la piel; el agua de este cereal es el secreto de las japonesas para una
piel clara y tersa. Sirve como tónico en nuestra rutina de belleza ya que aclara la piel y junto con el perejil funciona excelente como
tratamiento desmanchador.
El arroz
abre los poros, calma la irritación y protege el cutis; por su lado el perejil aclara y
desmancha la piel, previene la aparición de puntos negros y espinillas. También actúa como cicatrizante y es rico en antioxidantes y vitamina C, por tal razón ayuda a combatir los radicales libre y estimula la producción de colágeno.
Esta receta se utiliza en frío preferiblemente por que las temperaturas bajas ayudan a generar un ligero efecto “lifting” en la piel; así ayudamos a reducir las líneas de expresión finas. Lo bueno de estas recetas naturales es que funcionan para
todo tipo de piel a cualquier edad. A veces es bueno consentirnos con pequeños detalles como un momento de relajación y belleza.
Tal vez no seamos consientes de ello, pero cuando nuestra piel está saludable, la confianza en uno mismo se refuerza. Los problemas en la epidermis son normales y cualquiera de nosotros podemos sufrir de ellos, por eso cuidarnos de manera natural puede ser una gran opción.
