Los cubanos, las milicias bolivarianas, los colectivos, las bandas criminales, el ELN, las FARC, los cárteles de la droga, Hezbolá, Al Qaeda, el ejercito chavista y el gobierno corrupto tienen tomada Venezuela desde hace varios años. Como durante la peste negra que asoló a Europa con la llegada de las ratas y sus pulgas que traían consigo el bacilo que atacó a una población con defensas bajas debido al hambre, fruto de la caída de la producción, estas nuevas ratas se pavonean a sus anchas en un país destruido con la anuencia de un gobierno ilegitimo y represor que cuenta con el supuesto apoyo de unos pocos países como Rusia y China. Esta situación es insostenible y por eso este primero de mayo se puede convertir en el día histórico que marque, para bien o para mal, un antes y un después en la evolución del camino emprendido por los venezolanos en busca de la libertad, cuando Juan Guaidó ha convocado a una gran marcha, al estar por cumplirse los cien primeros días de su presidencia -que no puede llamarse de otra manera a pesar de que se encuentre usurpada por Maduro-.
Con el reconocimiento de más de cincuenta países y con un apoyo popular mayoritario, Juan Guaidó, luego de su juramentación del 23 de enero, es el presidente legitimo de su país. ¿Qué hace falta para que pueda ejercer plenamente sus funciones? Tan sólo que uno de los personajes más despreciables de la historia de América, Nicolás Maduro, se haga a un lado. Hacer realidad algo tan simple como eso se ha convertido en casi un imposible sin que se sepa claramente qué y quienes sostienen al tirano en Miraflores.
Para la historia, la actual situación política de Venezuela será vista como lo más absurdo que le haya podido ocurrir a una nación en pleno siglo XXI. Qué el mundo mire el sufrimiento de millones de seres humanos, y los horrores de una dictadura y no tenga el coraje y la dignidad de ayudar a ponerle fin, no tiene explicación. Es el momento para que este país reciba todo el apoyo internacional al jugarse el todo por el todo este primero de mayo. Un analista venezolano me dijo que podría ser el del fin de la esperanza. Ante ese pronostico no quedaría otra opción que la de ir hasta las últimas consecuencias, cuando lo único que tienen que perder los venezolanos es una esperanza revivida hace cien días con la aparición de un joven líder que ha sabido unir a su pueblo y llamar la atención del mundo.
Maduro está sentado sobre una bomba y una manifestación como la que se verá este primero de mayo puede ser el detonante que la haga estallar. Nada más y nada menos que eso es lo que está en juego.
Al cumplirse los cien días de Guaidó
Lun, 29/04/2019 - 12:42
Los cubanos, las milicias bolivarianas, los colectivos, las bandas criminales, el ELN, las FARC, los cárteles de la droga, Hezbolá, Al Qaeda, el ejercito chavista y el gobierno corrupto tienen tomad