Viruta, el orgulloso e icónico actor mexicano

Viruta y Capulina, son dos personajes que en la década de los 60 marcaron una tendencia importante para el cine mexicano. Marco Antonio Campos, nacido el 9 de septiembre de 1919, fue un actor, comediante, cantante, músico, guionista y locutor que de la mano de Gaspar Henaine logró un éxito alrededor del mundo por sus actuaciones. Su época dorada tan solo duró diez años y se dio desde 1956 hasta 1966. Todo sucedió en la cafetería de una estación radial de México después de que 'Capulina' le rogara insistentemente a 'Viruta' para que hicieran una alianza. Henaine se encontraba desesperado, pues sus compañeros del trío 'Los Trincas' lo dejaron abandonado en una gira por Nueva York. Tras varios meses de insistir, Campos cedió y formaron así el éxito radial 'Capulina y Don Viruta' que los catapultó a la cima cinematográfica. En el año de 1957, aparecieron sus primeras películas, Se los chupó la bruja y La sombra del otro. Antes de que fueran proyectadas, en Viruta causaron un impacto devastador y en su momento sintió que la actuación no era lo suyo. Al conocer las innumerables cifras que habían en las taquillas por ver sus largometrajes, decidieron continuar. El éxito llegó a su vida. Sentía estar en la cima y lo único en lo que pensaba era de que manera podía seguir divirtiendo a sus fanáticos. En este punto, poco a poco los disgustos que tenía con su compañero de trabajo los llevaron a una inminente separación.

Viruta el orgulloso 

Es aquí cuando todo se empezó a volver gris. A los ex compañeros tan solo les quedaban dos películas por realizar, en escena parecían hermanos pero fuera de ella, no. Su esposa, María de los Ángeles Pérez, falleció tras un problema de cáncer por lo que Capulina asistió en compañía de su esposa al velorio, pero Viruta lo expulsó, recordándole que ya no era bienvenido. Gaspar Henaine volvió a sus inicios, le rogó incansablemente a Campos que lo perdonara y así pudieran volver a grabar, a lo que recibió como respuesta que ni por todos los millones o trofeos del mundo volvería con él.

La cuarta es la vencida

Tres infartos al corazón no fueron suficientes para acabar con la vida del reconocido actor. A pesar de esto, su pasión por el tabaco hizo que llegara un último infarto que acabó con su vida. Solo queda por decir que jamás se reconcilió con Capulina. Por el contrario, le pidió el favor a su familia que si el moría primero no dejaran ingresar a Henaine o que lo sacaran a las patadas.