Como conservador creo que en el individuo libre como un ser pensante, que no puede ser utilizado para alcanzar los fines de otras personas u organizaciones. Esto, porque la razón humana está condicionada a los designios de la naturaleza y no puede ser ajena a la experiencia (como lo he escrito en mis anteriores artículos).
Sigo haciendo énfasis en que la razón humana proviene de la libre experimentación bajo una responsabilidad. Que el ser humano se forma bajo el pilar más importante de la sociedad: la familia. En contraparte, encontramos el marxismo que basa el conocimiento del hombre, no en la experiencia, sino en un colectivo de ideas inexistentes y abstractas.
Es imperativo respetar la libertad del individuo para poder respetar las libertades colectivas. El estado no puede ejercer una presión de cambio en lo que desea hacer un individuo; claro está, en el entendido que esta acción no interfiera con la libertad o derecho de otro sujeto en la naturaleza de la que hace parte.
En el marco de la libertad, es la impredecibilidad la que hace el progreso posible, y es esta la que nos da la certeza de la imperfección del ser humano. La prueba y error, es el vehículo para rectificar en gran parte la imperfección humana. La consecuencia de que el ser humano fuera perfecto sería el estancamiento del progreso, no habría razón para vivir. ¿De que serviría esforzarnos si todo está solucionado?
Aquí llegamos a que el esfuerzo es la base de todo progreso. Por esto el mundo está en constante cambio, evolución, es dinámico, es diverso. Por ello concebir una sociedad exitosa se basa en que ocurran todos los accidentes posibles. Estas acciones ocurren a razón de bastantes conocimientos, acciones, hábitos que hacen parte del patrimonio cultural.
Entender estos accidentes, aprender de ellos y mejorar sobre estos, es lo que hace posible a una sociedad exitosa.
Otra razón para ser conservador. Desconfío de conferir a alguna entidad del estado la capacidad de decidir sobre lo bueno o malo para una sociedad, sin un conocimiento previo de los accidentes en la civilización. Hay ciertos derechos naturales, valores, filosofías que preceden cualquier constitución. La libertad individual hace parte de estos.