El fenómeno inflacionario ha sido una de las preocupaciones más sentidas de las familias colombianas en los últimos meses. Pese a los esfuerzos que ha venido realizando el Banco de la República con el manejo de las tasas de interés, Colombia sigue con el tercer peor indicador de Latinoamérica y la segunda peor entre los países de la OCDE.
El panorama en un futuro cercano no es muy alentador. Por un lado, hay algunos anuncios del Gobierno Nacional que pueden tener impacto negativo en los indicadores de inflación, como la suspensión de los subsidios al diesel. Por otro lado, se espera que el fenómeno del niño se recrudezca en este último mes y en el primer trimestre del año que está por iniciar.
Así las cosas, el pasado 3 de noviembre, el IDEAM declaró oficialmente el fenómeno del niño en Colombia. De acuerdo con el informe de la entidad, la temporada con mayor intensidad inició en noviembre de 2023 e irá hasta enero de 2024. Este fenómeno ya está teniendo efectos sobre el precio de la energía, especialmente en la región caribe. Según el DANE, en noviembre, la variación anual del IPC se ubicó en 10,15% y, a pesar de que se mantiene la tendencia a la baja, preocupa que tres ciudades capitales de la costa muestran los mayores niveles de inflación (Santa Marta, Barranquilla y Montería) y todas las ciudades capitales de esta región se encuentran con niveles de inflación por encima del promedio nacional.
En este mismo sentido, al analizar la inflación mensual en noviembre, el IPC registró una variación de 0,47%, superior al dato de octubre de 2023 (0,25%), donde nuevamente cinco de las ciudades capitales de la costa caribe registraron las mayores tasas de inflación mensual (Santa Marta, Riohacha, Barranquilla, Valledupar y Montería). El componente que más contribuyó (0,20 pb) al incremento de precios fue la electricidad con un aumento de 5,89%. Particularmente, en Santa Marta, la ciudad capital con mayor variación mensual del IPC, el componente de electricidad fue el que más contribuyó a la inflación mensual con un incremento del 19%.
Esto debe ser un llamado de atención al Gobierno Nacional para que tome medidas urgentes con el fin de atacar este fenómeno económico que golpea principalmente a las familias más vulnerables. Se deben focalizar los esfuerzos en reducir el costo de la energía eléctrica que comprende uno de los componentes que mayor impacto tiene en los precios de la canasta básica. De igual manera, invitamos al Gobierno para que reconsidere, al menos hasta cuando los índices inflacionarios sean mas aceptables, la idea de eliminar los subsidios al diesel.