Durante años, se pensaba y actuaba desde la óptica de “yo gano y tu pierdes”, sin entender que era una ganancia a corto plazo, desconociendo que mediante acuerdos y colaboración a largo plazo, se logran resultados superiores a los proyectados, mejorando además la confianza y el éxito de todos. Por esto, cada vez más se crean y fortalecen las relaciones entre empresas y gobiernos, así como entre la academia y las empresas siendo esencial para desarrollar proyectos, competir, crear sinergias, participar en negociaciones, e innovar colaborativamente para encontrar oportunidades de negocio y generar beneficios para todos los grupos de interés.
Cada vez cobra mayor importancia la relación universidad y empresa al promover soluciones que permiten la creación de conocimiento estableciendo nuevos procesos, metodologías de trabajo, líneas de productos y estrategias en todos los campos. Esto permite que las investigaciones de las universidades se conecten con las necesidades de las empresas, especialmente cuando las empresas, no tienen áreas de I+D+I+C (Investigación, Desarrollo, Innovación + Creación) generando una oportunidad de cooperación incremental de largo plazo.
Las universidades están creando vínculos con las empresas y gestionando modelos de cooperación que van desde consultoría hasta alianzas para investigaciones y las empresas crean oportunidades para que los estudiantes realicen su práctica empresarial y participen en el desarrollo de productos sostenibles e innovadores, aporten con la estrategia de transformación digital, ofreciendo alternativas para convertir retos en oportunidades y fortalezas para diferenciarse de los otros.
Los últimos años se han caracterizado por la celeridad de los cambios, por la evolución de las tecnologías emergentes, por la preocupación por el medio ambiente, por la digitalización de la economía y por la importancia creciente que ha adquirido la sociedad del conocimiento. La globalización ha propiciado que el conocimiento sea el motor de desarrollo de una sociedad constituyéndose en la base de estructuras productivas y fuente de ventaja competitiva. La transferencia del conocimiento como base del progreso, es esencial para el desarrollo económico y social del país, por esto la universidad está estrechamente ligada al crecimiento de la sociedad, contribuyendo al desarrollo de nuevas áreas ocupando un lugar esencial en la sociedad del conocimiento.
Por lo tanto las instituciones de educación superior están expandiendo su rol, a través de una mayor interacción con otros agentes, como empresas, gobiernos, agremiaciones, entre otras, aumentando su aporte a la sociedad, asumiendo un rol de universidad emprendedora, en virtud del cual el progreso de la sociedad es esencial para el desarrollo económico, generando mejores condiciones de competencia.
Por eso se requiere de un eficaz vínculo entre universidad y el sector productivo, que fomente la formación de técnicos y profesionales que demanda el mercado laboral e impulse a las empresas mayor inversión en investigación y desarrollo como una actividad estratégica para incorporar el conocimiento, el talento humano competente y el progreso científico a los procesos productivos.
Existe un modelo de cooperación llamado, la Triple Hélice, que integra ciencia, tecnología y desenvolvimiento económico, bajo el supuesto que la academia debe integrarse con la empresa para maximizar la capitalización del conocimiento, concepto que caracteriza las facultades que van adquiriendo las universidades para dar máxima realización económica y comercial a su investigación y alcanzar altos niveles de ingresos y ser reinvertidos en el proceso investigativo o destinados a otras actividades educativas.
El modelo propone la visión de la Universidad emprendedora, a partir de su estructura y funciones académicas. Así mismo, las condiciones para la integración son la transformación interna en cada una de las hélices, las influencias de una hélice sobre otra, las redes trilaterales y el efecto circular del cambio en cada esfera sobre sí mismas y sobre las demás.
Un ejemplo de esta triple hélice, es el proyecto de conectividad, centros digitales, que desde hace unos 2 años se ha venido ejecutando por los operadores de telefonía, con el fin de conectar a los municipios del país especialmente los más apartados, en donde las universidades aportarían y apoyarían a los centros educativos con la transferencia de conocimiento a niños y jóvenes de todos los municipios e irlos preparando para su futuro profesional, así como a los profesores.
La relación que se establece entre estas tres esferas supone beneficios para cada una de ellas, no obstante, a pesar de que se han establecido nexos, todavía es necesaria una mayor vinculación para traducir la ciencia en valor para el mercado y que la investigación responda a la real demanda de la sociedad, especialmente por la rápida incorporación de las tecnologías emergentes, que permiten aumentar la productividad de manera exponencial y ser competitivos.
La transferencia de conocimiento como estrategia de competitividad es fundamental para el crecimiento empresarial, siendo las universidades las generadoras del conocimiento, el cual debe ser desarrollado y aplicado a la realidad empresarial, al permitir esta vinculación mediante alianzas. Estas alianzas, requieren estrategias que beneficien dicha actividad, por esto deben conocer las necesidades, limitaciones, fortalezas, oportunidades, amenazas entre otros, que caracterizan esta cooperación, intensificando la transferencia de conocimiento entre las partes.
Las universidades están haciendo esfuerzos importantes para fomentar las alianzas estratégicas con empresas y gobiernos, ya que los contratos de investigación, especialmente con las MiPymes, son limitados dada la capacidad y recursos que tienen para afrontar las problemáticas que se presentan en el mercado. La importancia de la práctica empresarial como mecanismo de alianza con las empresas, hace que se requiera de innovadoras estrategias y mayores responsabilidades para el practicante, para que este pueda aplicar su conocimiento de la empresa y su entorno, lo que haría que se fortalezca el vínculo (B2B) empresa - universidad, creando una relación gana a gana para la empresa, la universidad y estudiantes, aunque los mayores ganadores serán los ciudadanos, las familias, la sociedad, la economía, el medio ambiente y la competitividad del país.