El pasado sábado Guillermo Garzón, miembro de la comunidad LGBTI de Bogotá, quedó en encontrarse con un amigo. No llegó a la cita. Su amigo, extrañado por la ausencia de 'Guillo', como le decían de cariño, empezó a llamarlo a su celular pero nunca se pudo comunicar con él.
Después del fin de semana Guillermo, de 50 años, tampoco llegó a trabajar. Era contador de una entidad del departamento de Cundinamarca. Sus compañeros de oficina también lo extrañaron, esperaron un par de horas y al ver que no apareció se comunicaron con algunos familiares. Llamaron a una hermana, quien tampoco conocía el paradero del hombre.
Varios familiares empezaron a llamar a los amigos de Guillermo. Ninguno de ellos conocía el paradero del contador. Por redes sociales los amigos de 'Guillo' empezaron a publicar mensajes acerca de su desaparición.
Guillermo vivía solo en un apartamento en la localidad de Chapinero. Un par de amigos llegaron hasta la residencia donde tenía arrendado un apartaestudio. Golpearon insistentemente pero nadie abrió la puerta.
Una persona le indicó a los familiares de Guillermo que el pasado viernes lo vieron entrar al pequeño apartamento en compañía de un hombre más joven que él. Esa fue la última vez que alguien lo vio con vida.
Guillermo Garzón era empleado público, trabajaba en una entidad del departamento de Cundinamarca.
La dueña de la residencia, ante la insistencia y preocupación de los allegados de Guillermo, llamó a la policía y acompañados por los uniformados les permitió la entrada. Según fuentes de la policía, el lugar estaba totalmente desordenado. Había varios objetos en el suelo y cajones abiertos. Esa escena y el fuerte olor que percibieron fueron presagios de que algo malo había ocurrido.
En la habitación, encima de la cama, hallaron a Guillermo. El hombre estaba vestido y tenía las manos amarradas contra su espalda. Los policías comprobaron que estaba muerto. Tenía alrededor del cuello la cuerda con la que al parecer le quitaron la vida. "Murió por asfixia", indicó una fuente policial.
Las pesquisas para resolver este crimen las asumió la Sijin de la Policía Metropolitana de Bogotá, institución que realizó el levantamiento del cadáver.
Según fuentes judiciales, las autoridades manejan varias hipótesis sobre el macabro hecho. Una de ellas, la que tiene más fuerza, es que pudo tratarse de un robo que terminó en tragedia. Pero no se descarta un posible crimen pasional o un caso de homofobia.
"Chapinero es una localidad que tiene varias cámaras de vigilancia privadas y públicas. Se intentará establecer si alguna de las que está cerca a la residencia de la víctima entrega información vital para saber realmente qué fue lo que ocurrió y quién le dio muerte a este sujeto", le indicó a KienyKe.com un funcionario de la Sijin.
Contador público fue asfixiado en su apartamento
Mar, 18/11/2014 - 14:53
El pasado sábado Guillermo Garzón, miembro de la comunidad LGBTI de Bogotá, quedó en encontrarse con un amigo. No llegó a la cita. Su amigo, extrañado por la ausencia de 'Guillo', como le decía