Luego de arduas investigaciones, las autoridades de La Florida, en Estados Unidos, habrían descubierto un crimen que estuvo oculto por 17 años.
En el 2000, un hombre identificado como Mike Williams salió de su casa en el Estado de la Florida a cazar patos en el lago Seminole. Las horas pasaron y al ver que su esposo no regresaba, Denise Merrell Williams y el mejor amigo del hombre, Brian Winchester, salieron a buscarlo pero nunca lo encontraron.
La mujer siempre se mantuvo firme con la misma versión de que su esposo había muerto ahogado, víctima de un accidente en su bote, esto ante los cuestionamientos de las autoridades.
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Tan solo seis meses después y aún con el caso abierto, la mujer convenció a un juez para que declarara la muerte de Mike y de esta manera pudo cobrar más de 2 millones de dólares del seguro de vida que le había vendido Brian Winchester.
Cinco años después, Williams y Winchester se casaron. Aunque la relación duró solo 11 años, pues en 2016 tramitaron su divorcio. Sin embargo, eso no levantó sospecha entre las autoridades, lo que reabrió el caso fue que a finales de 2017 encontraron el cuerpo de Mike Williams, lejos del lago a donde había ido de cacería.
Tras las respectivas inspecciones al cuerpo del hombre, las autoridades del condado encontraron inconsistencias entre la versión de la mujer y las verdaderas causas de la muerte y fue solo hasta el 2018 que compareció ante la justicia.
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Las pruebas técnicas al cuerpo permitieron concluir que Denise estuvo involucrada en el homicidio de su exesposo y fue detenida por orden de un tribunal del condado de León, que la acusó de asesinato en primer grado y conspiración para cometer el hecho.
Denise se enfrenta a sus cargos judiciales sin derecho a fianza y, según el "Tallahassee Democrat", se conoce que el jurado está convencido de que ella ayudó a planificar y encubrir el asesinato de su primer esposo y que fue Brian Winchester quien acabó con su vida de un disparo.
