Las últimas decisiones que ha tomado el Papa Francisco frente a los casos de pedofilia que involucran a la iglesia católica muestran el verdadero interés del sumo pontífice de sanear la iglesia y condenar abiertamente los crímenes y violaciones contra los niños.
En las primeras horas de este jueves 25 de septiembre el Papa Francisco destituyó al obispo paraguayo Rogelio Ricardo Livieres Plano, acusado de proteger a un sacerdote argentino sospechoso e investigado de abusar sexualmente de menores de edad en Estados Unidos.
Esta destitución se da dos días después de que el Papa diera la histórica orden de arrestar al exarzobispo polaco Josef Wesolowsky, acusado de pagar por sexo con niños mientras ejercía como embajador del Vaticano en República Dominicana.
Las investigaciones contra Wesolowsky se iniciaron gracias a las denuncias publicadas por la periodista dominicana Nuria Esperanza Piera, directora de la empresa de medios y contenidos NCDN, quien en septiembre de 2013 denunció en su programa de televisión los presuntos abusos que el obispo polaco cometía con menores de edad en el sector turístico de Montesinos.
En la investigación periodística se grabó al representante de la Santa Sede en República Dominicana paseando por el sector de Montesinos, vestido de civil, e ingiriendo cerveza en uno de los establecimientos de la zona. Piera, como prueba de las presuntas violaciones a menores de edad, entrevistó a un niño de 14 años, quien al parecer trabajaba como lustrabotas en el sector turístico y quien reconoció al diplomático del Vaticano como el hombre que abusó de él y varios niños más. Según el testimonio Wesolowsky le daba a sus presuntas víctimas dinero a cambio de contactos sexuales que no implicaban penetración.
El Papa Francisco fue quien firmó la orden de arresto contra el exnuncio polaco. El Sumo Pontífice pidió celeridad en el desarrollo de este caso el cual consideró como "gravísimo".
Según el testigo, ante ellos Wesolowsky se hacía llamar Jusepe. El joven lustrabotas contó que el hombre llegaba a la zona donde él trabajaba a bordo de un campero y que se disponía a contactar menores de edad, casi siempre de escasos recursos, trabajadores ambulantes, a quienes después de darles en promedio 200 pesos dominicanos (10 mil pesos colombianos), se los llevaba para un apartamento en donde les hacía quitar la ropa y abusaba de ellos.
También le contó el menor a la periodista dominicana que los niños que se reunían con más frecuencia con el prelado recibían más dinero. A ellos les entregaba, más o menos, 2.000 pesos (92 mil pesos colombianos). El menor indicó que había oportunidades en las que el sacerdote se llevaba de la zona, al mismo tiempo, a cuatro o cinco jovencitos, a quienes ademas de tocarlos y obligarlos a realizar prácticas sexuales se divertía grabándolos y tomándoles fotografías con un celular.
Las denuncias contra el obispo no se quedan ahí. Al parecer, según investigaciones periodísticas, el prelado era íntimo amigo del sacerdote, también polaco,Wojciech Waldemar Gil, conocido en ese país como el padre Alberto Gil, quien era párroco en la comunidad de Juncalito y a mediados de 2013 huyó del país cuando fue acusado de abusar sexualmente de 14 niños que hacían parte de su congregación.
Algunas personas cercanas al obispo indicaron en el programa investigativo de Nuria Piera que los compatriotas Wesolowsky y Wojciech hacían reuniones con menores de edad y que ellos escogían pasar la noche con los más pequeños.
Laurie Goodstein, periodista del New York Times, también llevó adelante una investigación en la que recopiló otras versiones de niños de escasos recursos que contaron cómo el obispo, a quien los menores, por su acento extranjero, llamaban el 'Italiano', les daba dinero y regalos por verlos masturbándose, nadar desnudos y llevar a cabo prácticas obscenas.
Según Goodstein, el exnuncio del Vaticano aprovechaba la pobreza y hasta la enfermedad de los jóvenes para abusar de ellos. "Definitivamente me sedujo con el dinero", le dijo Francis, un joven de 14 años, a la periodista del medio estadounidense, a quien también le indicó que se sentía muy mal por lo que hacía, pero que "necesitaba el dinero". Según el menor, conoció al 'Italiano' cuando empezó a lustrar sus zapatos en la zona de Montesinos. El hombre, indicó Francis, empezó a ofrecer sumas cada vez más grandes de dinero para los actos sexuales.
Wesolowsky, de 66 años, quien ejerció como nuncio del Vaticano en la República Dominicana entre 2008 y 2013, por orden directa del Sumo Pontífice, fue capturado por guardias de la Gendarmería vaticana y puesto en prisión domiciliaria en la Santa Sede en Roma, así lo confirmó en un comunicado de prensa el portavoz de la oficina del Vaticano, el padre Federico Lombardi.
En contra del exobispo Josef Wesolowsky hay varias versiones de jóvenes quienes, al parecer, fueron sus víctimas en República Dominicana. Se cree que pudo abusar de más de 15 niños. Se expone a una condena de siete años de prisión.
El 'Italiano' fue vincualdo a un proceso penal dentro de las leyes canónicas por el delito de pederastia y de posesión de material con pornografía infantil. Fue privado de sus títulos y funciones y reducido al estado laical, lo que indica que es un cristiano más sin orden sacerdotal.
El exnuncio fue ordenado a los 23 años en Cracovia por el entonces arzobispo Karol Józef Wojtyla, quien años más tarde se convertiría en el Papa Juan Pablo II. En 1999 fue nombrado nuncio apostólico en Bolivia, en 2002, fue nuncio de a Kazajstán, Tayikistán, Kirguistán y Uzbekistán y en 2008 fue enviado a la República Dominicana.
Según Lombardi, el vocero del vaticano, el exnuncio polaco será procesado en base a las normas vigentes antes de la reforma penal del 2013 y podría tener una condena de seis a siete años de cárcel. También indicó el portavoz que el juicio contra el acusado iniciará a finales de este año o a comienzos de 2015. Wesolowsky está siendo asistido por un abogado de oficio.
Turista italiano que abusaba de niños era un obispo polaco
Vie, 26/09/2014 - 08:55
Las últimas decisiones que ha tomado el Papa Francisco frente a los casos de pedofilia que involucran a la iglesia católica muestran el verdadero i