En el año en el que la Selección Colombia volvió a clasificar a un mundial de fútbol de mayores luego de 16 años, las evaluaciones son un poco más severas. En ellas, algunos jugadores tuvieron un año regular o malo en sus clubes y algunos no dieron lo esperado con la camiseta nacional.
El gran fracaso sin duda fue Teófilo Gutiérrez. El delantero barranquillero tuvo una destacada labor con el amarillo, azul y rojo pero en materia de clubes no tuvo un buen año. Durante el primer semestre actuó con Cruz Azul perdiendo la titularidad por su bajo estado físico. Al final pudo recuperarla convirtiendo goles clave que llevaron al cuadro cementero a la final del torneo en el que cayó ante América de manera agónica.
Luego de ese pequeño paso por el equipo azteca, Teo se empecinó en fichar para River Plate provocando un litigio entre el equipo argentino y el mexicano. Dicha discusión no permitió que el barranquillero jugara los primeros partidos de la temporada con el club de La Banda pero no escatimó promesas mientras estaba parado: “Ya vienen los goles”, dijo. Sin embargo, esos nunca llegaron y Gutiérrez solo anotó un gol en el torneo gaucho y dos más en la Copa Sudamericana en la que River alcanzó los cuartos de final.
Otro jugador que pasó de un equipo a otro y no dio pie con bola es Abel Aguilar. Empezó la temporada con Deportivo La Coruña, que perdió la categoría bajando a segunda división. Como su pase pertenecía a Hércules dejó al equipo gallego pero tenía claro que él en la segunda de España no jugaría. Entonces pasó a Toulouse de Francia pero allí no tuvo la regularidad deseada jugando 12 partidos no siempre como titular. El equipo marcha undécimo en la liga gala sin muchas pretensiones.
La temporada de Pablo Armero y Camilo Zúñiga también fue irregular. El ex América de Cali fue suplente en Napoli durante todo el año puesto que los entrenadores, Walter Mazzarri en primer medida y Rafa Benítez después, utilizaron a Zúñiga por izquierda. Armero sonó para cambiar de club en verano pero finalmente se quedó y apenas pudo tener minutos en los últimos meses cuando Zúñiga se lesionó.
Edwin Valencia tampoco pudo tener un buen 2013. Las lesiones lo acogieron desde marzo y no pudo recuperarse hasta casi acabarse el torneo de Brasil. Las molestias truncaron el traspaso de Valencia a Cruz Azul y al recuperarse Pékerman lo llevó a la gira europea de la selección en noviembre, pero al regresar se resintió y para colmo perdió la categoría con Fluminense. Luego, el equipo carioca fue rescatado de la segunda división en los escritorios.
Jackson Martínez fue un paradigma. El jugador marcó una temporada inmaculada con Porto pero no lo pudo refrendar en la selección. Cierto es que no tuvo muchas posibilidades con la tricolor pero en las pocas que tuvo se vio confundido y no pudo hacerse amigo del gol, algo grave para un artillero.
Sin embargo, hay que decir que la unión de grupo en el seno de la selección fue el factor clave para que pese a los rendimientos individuales, la selección alcanzara después de 16 años el tiquete a un mundial de fútbol.
Los futbolistas colombianos que se rajaron en 2013
Mié, 25/12/2013 - 07:30
En el año en el que la Selección Colombia volvió a clasificar a un mundial de fútbol de mayores luego de 16 años, las evaluaciones son un poco más severas. En ellas, algunos jugadores tuvieron u