El español y número uno del mundo en el tenis, Rafael Nadal, comenzó con pie derecho la temporada de tierra batida al coronarse campeón en el Masters 1.000 de Montecarlo. La final la disputó contra el japonés Kei Nishikori y con parciales 6-3 y 6-2 en una hora y 33 minutos. Con este triunfo suma 11 campeonatos en suelo monegasco.
Nadal ganó su primera corona en 2005 y luego repitió en 2006, 2007, 2008, 2009, 2010, 2011, 2012, 2016, 2017 y 2018. De esta manera, el español confirma su buen nivel y dominación en canchas de polvo de ladrillo.
"No sólo dar la enhorabuena por ganar el torneo, sino por el gran nivel mostrado durante toda la semana. Ha dominado demasiado", comentó Nishikori al término del partido.
[single-related post_id="860472"]
Rafael reconoció su progreso y confianza en la cancha y demostró que aún queda más tenis y fuerza. "Los últimos cinco meses han sido muy difíciles, muy duros y siempre es una alegría poder ganar aquí", comentó el español, cuya próxima cita, el Conde de Godó, le espera a la vuelta de la esquina, y donde también ha ganado ya diez veces.
El japonés también regresó en buena forma, tras una lesión que lo mantuvo alejado de las canchas al finalizar la temporada pasada. Por su parte, Nadal no había tenido un gran comienzo de año tras diferentes dolores, por lo que decidió no participar en varios torneos Atp antes del Abierto de Australia. Desde entonces había retomado el nivel y ritmo pero se vio doblegado en torneos como Indian Wells y el ATP de Acapulco. Nadal busca tener el nivel deseado para seguir haciendo historia en el próximo Grand Slam, Roland Garros y en el que ya tiene una estatua por ser el máximo ganador de la competencia.
