Los perros no solo se han convertido en una de las mejores compañías para los seres humanos, sino que también tienen algunos sentidos más desarrollados que las personas, esto ha sido comprobado mediante diferentes investigaciones.
Por ejemplo, el famoso parapsicólogo Robert Morris dedicó su vida a investigar aquellos fenómenos paranormales. Hacia los años 60 se propuso conocer las actitudes que tenían algunos animales como los caninos con respecto a sí percibían o no espíritus o fantasmas.
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El parapsicólogo reunió a cuatro animales diferentes, entre los que estaba un perro, una rata, una serpiente y un gato, a los cuales metió en una habitación en la que se decía había espíritus que estaban sin rumbo.
Los animales actuaron de manera diferente, pero un factor común que experimentaron fue buscar un espacio donde se podían resguardar, bien fuera debajo de la cama o en cualquier otro rincón. Después Morris colocó a las mismos animales en un habitación tranquila y ninguno tuvo alguna reacción extraña.
El estudio concluyó que diferentes especies pueden percibir presencias extrañas.
¿Mito o realidad?
Para resolver esta inquietud kienyke.com consultó con el parapsicólogo Armando Marti, quien expresó: “Los perros tienen una inteligencia emocional y no racional, es decir, no construyen pensamiento a través de las palabras, pero por asociación o por estímulo respuesta, e incluso por la intuición sienten en una parte del cerebro (lóbulo derecho) aquellas energías que el ser humano por la lógica y la razón no hace caso o simplemente las omite”.
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El experto agregó que por el contrario “los perros sí detectan las energías de las almas en pena o alguna presencia de actividad paranormal. Además, lo que se puede detectar en la mascota es que se le eriza el lomo, ladran, jadean y, en ocasiones, pueden llorar si la presencia es demasiado poderosa y siniestra. Esto sucede porque se inquietan cuando hay cambios de luz de manera intempestiva, ya que ellos ven a blanco y negro”.
Es necesario aclarar que los animales se comportan diferencialmente cuando al canino no le gusta una persona, porque puede que ésta tenga malas intenciones, sin embargo, si hay presencia paranormal siente miedo y su cola se puede recoger.
“Uno de los animales que percibe de un modo más fuerte estas presencias extrañas es el gato, por tal motivo son amigos de personas que se dedican a la magia o la brujería. Por el contrario, los perros actúan como defensores y sus reacciones son más evidentes. Adicionalmente, ellos ayudan a quitarle el karma o las malas energías a su dueño”, explicó el experto.
La razón para que a las personas les sea más dificultoso detectar esta clase de energías, es porque el lóbulo cerebral izquierdo, donde se encuentra el raciocinio, omite todas estas sensaciones, ya que se ve como algo ‘prohibido’, por ser algo insano. Sin embargo, Martí resaltó que “todos los seres humanos contamos con ese sexto o séptimo sentido, que nos hace percibir esa sensación sensorial y sí pueden captar esas presencias”.