Cada 9 de mayo en Colombia se celebra el Día Internacional de las Aves. El país actualmente ocupa el primer lugar en el mundo en riqueza de aves, con más de mil especies, de las cuales 197 son migratorias.
Por tercer año consecutivo, el país fue el ganador en el Global Big Day, una iniciativa de ciencia ciudadana que comenzó en 2015 para crear conciencia sobre la importancia de la conservación de las aves y el riesgo que las acecha. Además, pretende incentivar la construcción de conocimiento colectivo sobre el tema y su difusión a través de plataformas digitales.
En este día el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Ricardo José Lozano, visitó la exposición Itinerante “Aves de Colombia” del maestro Humberto Salazar López. Allí se pudieron observar 21 obras, incluyendo la colección “Darwin la Evolución”.
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Salazar desde hace 30 años diseña esculturas de especies en vía de extinción con material reciclado como el plástico y papel molido, en un 70%.
La exposición, organizada por la Subdirección de Educación y Participación – Grupo de Cultura Ambiental, está basada en un estudio ornitológico del Instituto Humboldt y el Instituto de Ciencias de la Universidad Nacional en donde las esculturas se desarrollan de acuerdo a la composición fisiológica de cada especie.
Entre las especies representadas se encuentra un cóndor de los Andes, “tiene un tamaño real, es didáctico ya que se puede desarmar y armar, cuenta con 3.600 plumas hechas todas a mano y sus ojos fueron hechos con vitral para darle la sensación de iris”, afirmó el maestro Salazar.
El llamado en la conmemoración del Día Internacional de las Aves es a protegerlas, cuidar su hábitat y denunciar el tráfico ilegal de ellas.
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La Secretaria Distrital de Ambiente también hizo un llamado para reiterar a los ciudadanos la necesidad de proteger y conservar estas especies, al igual que los ecosistemas en donde estas habitan.
La capital del país goza de una alta riqueza de aves, representada en cerca de 200 especies. A pesar que Bogotá es un espacio fuertemente transformado, alberga aves que han logrado tolerar estas condiciones y coexistir con las personas. Entre ellas están las mirlas, el copetón y la lechuza de campanario.
La gran mayoría de las especies de aves en Bogotá, tanto residentes como migratorias, habitan en los humedales. La cifra aproximada está alrededor de 150 especies en estos ecosistemas.
