La quema tiene dos efectos en los animales y plantas amazónicos. El inmediato es la muerte directa por acción del fuego. A largo plazo, los cambios drásticos en los ecosistemas modifican la relación de las especies con el medio ambiente e incluso pueden conducir a la extinción. En Brasil, esto es lo que les puede suceder a algunas especies amenazadas.
La especie de mono Plecturocebus grovesi, recién estudiado por investigadores en 2018 y la especie Plecturocebus miltoni, descrito por la ciencia en 2014, apenas se han revelado al mundo.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) los considera en peligro crítico, el último paso antes de ser declarado como extinto. Ambas especies habitan en una de las regiones que más quemaron en 2019.
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Ambos tipos de primates son parte del grupo conocido popularmente como zogue-zogue o titi (subfamilia Callicebinae), que existe solo en América del Sur. Según José de Sousa Silva Júnior, un investigador del Mastozoología del Museo Paraense Emilio Goeldi, los estudios han demostrado que son especies totalmente nuevas y diferentes tanto a nivel genético como morfológico y sus hábitats están muy concentrados, lo que los hace aún más sensibles a la interferencia del paisaje.
“Además, los primates neotropicales son casi exclusivamente animales arbóreos y esto restringe aún más las áreas que pueden ocuparse dentro del área general. Los animales no pueden sobrevivir en áreas sin cobertura forestal”, explicó el investigador.
Consecuencias de los incendios
Este año, el número de incendios en el Amazonas fue el más alto desde 2010. En Mato Grosso, una de las regiones más afectadas fue la parte norte. Ciudades como Colniza y Aripuanã se encuentran entre los quince municipios con el mayor número de focos de incendios.
"Resulta que ambos interfluvios (lugares de reunión fluviales donde viven las especies) han sido sometidos progresivamente a la deforestación. Mirando el mapa de los recientes incendios de la Amazonia, ambos están en la línea de fuego", dijo Silva Jr. (Ver mapa a continuación)
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Geepeace[/caption]
Mato Grosso está justo en el medio del Arco de Deforestación, un gran cinturón de destrucción que corta a Brasil por la mitad, desde Maranhão hasta Acre. Allí es donde la frontera agrícola avanza sobre el bosque, lo que lleva a la pérdida permanente de especies.
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El futuro de la especie
“El artículo descriptivo de la especie Plecturocebus grovesi incluía una proyección de la pérdida de hábitat para el año 2042 si las condiciones de deforestación se mantenían en las tasas observadas hasta el año pasado. El resultado fue una pérdida de hábitat que solo podría revertirse si hubiera un programa efectivo de reforestación.
“Esta proyección ya no es válida ya que el escenario cambió en 2019, acelerando el proceso de pérdida de hábitat. El estado de conservación de la especie es peor que cuando se descubrieron”, agregó José de Sousa Silva Júnior.
Poco se sabe sobre las nuevas especies de titis, pero su existencia ya está amenazada. El siguiente mapa muestra alertas recientes de deforestación cerca de la región de Plecturocebus miltoni.
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Greenpeace[/caption]
Los investigadores estiman que en 24 años, el 86 % del hábitat natural de Plecturocebus grovesi habrá sido destruido si la expansión de la frontera agrícola continúa al mismo ritmo. La quema del Amazonas, que se utiliza para deforestar, puede tener consecuencias trágicas para estos animales.
