Un trino del ministro de Defensa de Colombia, Luis Carlos Villegas, esclarecería el hecho de los periodistas ecuatorianos que estaban secuestrados por una disidencia de las FARC liderada por alias "Guacho". Según el ministro, los cuerpos, aún con una prueba pendiente, sí son los de los tres ciudadanos del país vecino.
En la noche del viernes 22 de junio, el Ministerio de Defensa confirmó: "Policía Colombia y Medicina Legal informan que cartas dentales dan más certeza sobre las identidades de los cuerpos de los periodistas ecuatorianos encontrados, al 99%. Sin embargo, se adelantarán también las respectivas pruebas de ADN".
Además, horas antes, Villegas aseguró que los delincuentes querían que los cuerpos hallados no fueran encontrados con facilidad, debido a cómo fueron encontrados, tras haberlos escondidos enterrándolos.
“Los asesinos de estas personas enterraron los cadáveres de tal modo que nunca los encontráramos. Esa fosa, cómo se hizo, dónde se hizo y con las minas antipersonal que tenían alrededor, era para que no se encontraran nunca y las familias de Ecuador y ambas sociedades permaneciéramos en la incertidumbre permanente”, explicó el jefe de cartera.
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El equipo del diario quiteño El Comercio, compuesto por el periodista Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra, fue secuestrado el 26 de marzo en una zona rural de la parroquia de Mataje, provincia de Esmeraldas, fronteriza con Colombia, a donde se habían desplazado para cubrir la inseguridad creciente en la zona.
El grupo disidente de las FARC autodenominado "Frente Oliver Sinisterra" que lidera Walter Patricio Arizala, alias "Guacho", autor del secuestro, los asesinó días después, según confirmó en su momento el propio presidente ecuatoriano, Lenín Moreno.
Las autoridades colombianas llevan más de 150 días luchando en contra de esa estructura criminal mediante la operación Hércules. Los resultados han dejado varias personas capturadas, sin embargo, la estructura estaría alcanzando más fuerza debido a un financiamiento de carteles mexicanos, lo que engrosa el número de militantes.
