En la Reserva Ecológica Privada Ingwelala en Hoedspruit, cerca del parque Kruger, al noreste de Sudáfrica, se encontraron unos restos humanos de un supuesto cazador furtivo, que ejercía la actividad ilegalmente, según informó la agencia de noticias AFP.
Aparentemente, la manada de leones se devoró casi totalmente al hombre, dejando solamente su cabeza, parte de su cuerpo y el fusil con el que cazaba. "Al parecer estaba cazando ilegalmente cuando fue atacado por un grupo de leones que lo devoró. Dejaron sólo la cabeza y algunos trozos de carne", dijo el portavoz policial Moatshe Ngoepe.
El incidente se produjo el pasado viernes y el cadáver, aún sin identificar, fue hallado en muy mal estado.
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"Parte del cuerpo del hombre fue recuperada después de que los leones fueran espantados por medio de disparos", según dijo la policía de la región de Limpopo, según el diario sudafricano Times.
Las fuentes indicaron que "la policía investiga también la posibilidad de que el fallecido fuera un cazador furtivo", pues se encontró "un rifle" en los alrededores del lugar del suceso.
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En Sudáfrica, más de mil rinocerontes fueron cazados de forma ilegal solo en 2017, según estadísticas oficiales, porque sus cuernos son muy codiciados en Asia. Por su parte, los leones son muy cazados, decapitados y mutilados porque son usados en la medicina tradicional.
