Por medio de un comunicado, el ministerio público aseguró que la entidad de salud "presenta un deficiente tratamiento, almacenamiento, transporte y disposición final de residuos peligrosos, que permanecen acumulados en la parte posterior del edificio, a la intemperie, sin ningún tipo de protección ni aislamiento, violando los principios de bioseguridad, gestión integral, precaución, prevención y comunicación del riesgo".
Para la Procuraduría, la situación que vive el centro médico pone en riesgo a los habitantes y visitantes de la isla. "Preocupa al ente de control la situación el riesgo de enfrentar epidemias y/o pandemias por la exposición a los residuos hospitalarios (anatomopatológicos y agentes patógenos) que se generan de la prestación de los servicios de salud y actividades complementarias".
[single-related post_id="866430"]A esto se suma, señala la entidad, "el deficiente aislamiento entre los pacientes del Clarence Lynd Newball Memorial, por las fallas en la aplicación de los protocolos de aislamiento, lo que incrementa el riesgo de infección entre ellos mismos".
El ministerio público también señala que la falta de disposición final de estos residuos genera graves daños ambientales a los ecosistemas y áreas protegidas de sensible afectación ecológica.
Ante este panorama, la Procuraduría aseguró que es necesario "la puesta en marcha de acciones encaminadas a cumplir con la política de gestión integral para el manejo de los residuos hospitalarios, que incluyan medidas operativas, financieras y administrativas para el seguimiento del almacenamiento, monitoreo y disposición final de ese tipo de sustancias infecciosas y peligrosas".