La condena a nueve años y seis meses de cárcel por corrupción dictada el miércoles contra el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) es un ataque a la democracia, señaló el Partido de los Trabajadores (PT).
"La condena representa un ataque a la democracia y a la Constitución Federal; aunque se trate de una decisión en primera instancia, es una medida equivocada, arbitraria y absolutamente ilegal, guiada por un juez parcial que se debe a los medios de comunicación y a la opinión pública que creó contra el expresidente Lula", indicó el PT en un comunicado.
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El partido, cuyo fundador es el propio Lula, aseguró que la sentencia se basa únicamente en declaraciones de delincuentes y que todo el proceso jurídico se basó en intentar probar teorías únicamente respaldadas por la palabra de condenados, "incapaces de comprobar sus afirmaciones con documentos o transferencias bancarias", añadió.
El juez de la Operación Lava Jato, Sérgio Moro, condenó a Lula por el caso del apartamento de Guarujá, ubicado en estado de São Paulo (sureste), que el expresidente presuntamente recibió como una especie de soborno por parte de la empresa constructora OAS, una de las implicadas en la trama corrupta de Petrobras.
Para el PT la condena contra Lula es un nuevo capítulo de la "farsa" orquestada por el "consorcio golpista" que asumió el país tras la destitución el año pasado de la expresidenta Dilma Rousseff (2010-2016).
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En este sentido subrayan que "curiosamente" la sentencia de Moro se publica un día después de que el Senado aprobara la reforma laboral impulsada por el Gobierno de Michel Temer, con medidas que acaban con derechos de los trabajadores "y que ahora serán olvidadas", lamenta la formación política.
"El PT mantendrá su defensa intransigente de Lula por creer en su absoluta inocencia (…) Sabemos que habrá justicia en las otras instancias del juicio y que toda la verdad saldrá a la luz; la historia será la principal testigo de su absolución y de su grandeza", concluyó el partido.
La sentencia de Moro contra Lula no es firme, ya que deberá ser confirmada en segunda instancia.
Si el líder de la izquierda brasileña fuera finalmente condenado, no podrá ser candidato en las elecciones de 2018, tal como había manifestado que era su voluntad.
Con información de Sputnik
