El gobierno de Rusia "operó un programa de dopaje patrocinado por el Estado" para garantizar el mayor número de medalllas posibles en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi 2014, ayudando a los atletas que habían dado positivo en los controles antidoping.
Decir que Rusia es una potencia deportiva no es nada nuevo, pero afirmar que varios de esos logros se dieron porque el estado promovió el consumo de sustancias prohibidas por el Comité Olímpico Internacional para aumentar el rendimiento de los atletas es algo grave. Sin embargo no se tratan de afirmaciones hechas a la ligera, sino de una elaborada investigación realizada por una comisión de la Agencia Mundial Antidoping (AMA).
Todo inició hace unos meses, cuando Gregory Rodchenkov el exdirector del Laboratorio Antidopaje de Moscú, explicó al New York Times que los servicios especiales rusos cambiaron muestras de atletas que dieron positivo en los controles, por muestras limpias de sustancias prohibidas.
El informe de la AMA, redactado por Richard McLaren, afirma entre otras cosas que “el laboratorio de Sochi trabajó con una única muestra, cambiando su metodología para permitir a los atletas rusos competir en los Juegos Olímpicos de Invierno".
El informe, según ha sido revelado por medios internacionales, relaciona más de 580 muestras de deportistas, en más de 30 deportes diferentes. McLaren afirmó que confía plenamente en los resultados del informe porque envió las muestras a laboratorios de Londres, en donde descubrieron que las botellas de las muestras alteradas contenían en los bordes marcas que comprueban su manipulación.
De los resultados del informe dependían varias medidas, como una solicitud por parte de los comités de Estados Unidos y Canadá de prohibir la participación de atletas rusos en los próximos juegos olímpicos que se llevarán a cabo en Río de Janeiro.
Antes de darse a conocer muchas personalidades rusas manifestaron su rechazo a la medida, que consideran exagerada. Uno de los que expresó su inconformidad fue Vladimir Putin, quien calificó de “injusta’ la iniciativa.
De esta forma el Comité Olímpico de Río decidirá si se hará la suspensión a Rusia, eliminando su participación en las justas que darán inicio al principios del mes de agosto.
