¿Todo vale? Esa es la pregunta que se hacen los simpatizantes del Pacto Histórico luego de que el líder religioso Alfredo Saade, actual precandidato de dicha alianza, señalara que la senadora del Centro Democrático María Fernanda Cabal sería bien recibida en ese grupo político que buscará la Presidencia de la República y las mayorías en el Congreso en las elecciones de 2022.
A través de su cuenta de Twitter, el líder del Movimiento Levántate aprovechó que Cabal perdió en las encuestas de su partido frente a Óscar Iván Zuluaga para expresar que la exprecandidata presidencial tendría cabida en esa convergencia de movimientos de izquierda. Su planteamiento es al menos distante de los postulados del Pacto Histórico y por lo tanto ha causado profunda molestia. Además, genera varias incógnitas sobre su papel al interior de esa coalición.
"Si María Fernanda cabal quisiera venir al pacto a acompañarnos a escribir la nueva historia de Colombia...es bienvenida", trinó Saade.
El representante David Racero no tardó en cuestionar el planteamiento de Saade. Afirmó que pese a que el Pacto Histórico no incluye personas sí tiene clara su agenda política, por lo que Cabal no tendría la puerta abierta en la mencionada alianza. "Gran confusión respecto al espíritu amplio e incluyente del Pacto. El Pacto no excluye personas, pero tiene claro la agenda política, económica y social que representa. Y esa apuesta no tiene nada que ver con los representantes de los terratenientes expropiadores, proguerra", expresó.
"No puede ser, señores, no puede ser", contestó el activista Beto Coral al mensaje del polémico líder religioso.
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El mensaje de Saade también generó burlas en sectores contrarios. Por ejemplo, congresistas del Pacto Histórico que se sumaron a la Coalición de la Esperanza aprovecharon para comentar la idea del político costeño.
"¿Cómo actualizo el gráfico de consultas presidenciales?", dijo la senador Angélica Lozano. Mientras que le senador Antonio Sanguino expresó: "Uyyy…. el “pastorcillo histórico” la sacó del estadio!!".
Es importante mencionar que, hace unos meses la presencia de Saade no cayó bien al interior del Pacto Histórico y, ahora como precandidato presidencial, parece estar sucediendo lo mismo, pues además de Gustavo Petro, nadie le ha dado la bienvenida a esa coalición.
En términos generales, la molestia de los integrantes de esa alianza con Saade radica en una serie de comentarios homófobos que expresó hace unos años, y que claramente van en contra del discurso progresista de ese sector. Por ejemplo, en 2014, Saade trinó: "NO matrimonio igualitario NO legalización marihuana NO aborto SI familia SI a la vida", banderas progresistas que han defendido a capa y espada los sectores alternativos, entre ellos, la coalición que lidera Petro. Además, en 2012, causó controversia al referirse al matrimonio igualitario en los siguientes términos: "El matrimonio entre homosexuales es pura paja".
Es de analizar que todo atendería a una jugada de Petro para no dejar escapar a Saade, un personaje político y religioso que se mueve mayoritariamente en Valledupar, pero que también ha logrado tener liderazgos en varias partes de la región Caribe y del país. Sumado a que incluir a Dios en su discurso le puede dar réditos con un sector de esta comunidad, que no es menor en Colombia. De acuerdo con cálculos del mismo Saade, está buscando congregar a más de un millón y medio de personas en torno al proyecto de Petro. Eso sí, habrá que ver si la presencia de esta controversial figura consigue sumarle y no restarle a la coalición.
