Una enorme tormenta política causó el rumor de que el exgobernador de Boyacá Carlos Amaya podría ser convocado por el gobierno de Gustavo Petro para ocupar el Ministerio de Agricultura. Un tema que ha generado una lluvia de rechazos de algunos representantes del petrismo, así como ya fue desmentido por el propio Amaya a través de un mensaje dirigido al senador Gustavo Bolívar.
Todo esto se dio en el marco de una tendencia digital que indicaba que el político colombiano estaría perfilado para aquel cargo, promovida con el hashtag #ConAmayaNo, pero que hasta el momento nadie en el Pacto Histórico ha logrado explicar su origen. De hecho, el tema ya ha sido desmentido en numerosas ocasiones por algunos congresistas de esta colectividad.
Así lo dejó claro, por ejemplo, el representante por Boyacá del Pacto Histórico, Pedro Suárez, quien no bajó de “especulación infundada” la supuesta llegada de Amaya al gobierno de Petro.
No obstante, tal llegó a ser el alcance de dicho rumor, que incluso fue replicado por grandes figuras del Pacto Histórico como el senador Gustavo Bolívar, quien se unió a la tendencia pidiéndole a Gustavo Petro priorizar en su gobierno a las organizaciones sociales que han sido su base política a lo largo de los años.
“Admiro la generosidad de Gustavo Petro para conformar un gobierno pluralista y de unidad que garantice la paz y la gobernabilidad en Colombia, pero no olvidemos organizaciones sociales, sindicales, campesinas, indígenas, afro y a la izquierda que se jugó la vida por esta causa #ConAmayaNo”, señaló Bolívar en su cuenta de Twitter, generando todavía más incertidumbre frente al rumor.
De hecho, el mensaje fue respondido por el propio Amaya, que le pidió al senador mucha más responsabilidad con lo que compartía y aseguró que toda esa tendencia era una estrategia para “desprestigiar al que piensa distinto”.
“Hay una estrategia sistemática y organizada para acabar moralmente al que piensa distinto, hay una línea narrativa en la cual van acabando con la reputación de los que piensan distinto y eso ha venido pasando conmigo en las últimas semanas”, aseguró Carlos Amaya en una entrevista con Semana, en la que además desmintió la posibilidad de llegar a ser ministro de Agricultura.
¿Carlos Amaya no?
En medio de todo ello, lo cierto es que este tema de Carlos Amaya y la posibilidad de verlo encarnando un lugar en el Gobierno de Petro, luego de haber sido un férreo crítico y de haber aterrizado en la candidatura de Rodolfo Hernández para segunda vuelta, causó una tremenda tormenta política que se dividió entre sus defensores y los que pedían excluirlo del Gobierno.
Esto, entre otras cosas, porque han surgido varias molestias en el petrismo por varias decisiones que algunos empiezan a sentir que invisibilizan a ciertos sectores que siempre han apoyado a Gustavo Petro y se consideran fundamentales para el triunfo del candidato el pasado 19 de junio.
Tal fue el caso de Fecode, por ejemplo, quien manifestó sentirse “maltratado” por no haber sido protagonista del equipo de empalme en educación de Petro con el gobierno de Iván Duque. Razón por la cual piden al entrante mandatario que les dé el “trato que se merecen”.
Precisamente en ese marco, se viralizó el rumor sobre Amaya y es probable que sea también la explicación de que a muchos les haya resultado creíble. No obstante, la lluvia de críticas al exgobernador (que incluyó toda clase de descalificativos y acusaciones), no fue vista con buenos ojos por parte de algunos políticos que en este momento se encuentran con el Pacto Histórico.
Uno de ellos fue, por ejemplo, Luis Ernesto Gómez, exjefe de gabinete Claudia López y persona cercana a Amaya, quien rechazó los ataques y aseguró que el exgobernador “es un hombre muy valioso, íntegro y respetuoso”. También se manifestó Carherine Juvinao, quien cuestionó: ¿Cuál es la necesidad de atacar a Carlos Amaya amigos del PH? Con el mayor respeto y aprecio, no estamos para generar rencillas inútiles, por demás infundadas".
Así las cosas, como nada más que un rumor queda calificada la supuesta llegada de Carlos Amaya al Gobierno del Pacto Histórico, que en este momento atraviesa un momento decisivo para ganar confianza en distintos sectores (con fichas seguras como el reputado economista José Antonio Ocampo en el Ministerio de Hacienda). Al tiempo, está en un contrarreloj para conseguir fuerzas que le permitan sacar adelante sus proyectos; algo que sí o sí requiere de conversaciones y acuerdos sobre lo fundamental con partidos que en el pasado estuvieron en lados radicalmente opuestos.
