Por fin es 24 de diciembre, fecha de la navidad y antecedente de nochebuena. En este día, regresan a los hogares colombianos un sinnúmero de tradiciones imperdibles que van desde el buñuelo, la natilla o dedicarle horas a la preparación de la cena, hasta rezar la última y más importante novena y aprovechar la fecha que sirve como excusa para estrenar ropa y compartir junto a los seres queridos.
Precisamente, ese último punto del estreno de ropa, o del “estrén” como se le conoce popularmente, es una tradición de años en Colombia que se ha logrado mantener por generaciones. De acuerdo con el Canal Institucional, esta tradición podría deberle el origen de su popularidad a las décadas de los 70s, 80s y 90s.
Se trata, en síntesis, de todo un ritual navideño que se empieza días o incluso meses antes de la navidad y que incluye desde el proceso de elección y compra en la tienda, hasta el afán por ser visto durante todo el día por cuantas personas sea posible. Aunque, eso sí, lejos de ser un concurso de belleza o una competencia, se trata más bien de un consenso general sobre la relación entre el “estrén” y la importancia del 24 de diciembre. Como quien tiene un evento elegante y debe asistir de smoking.
Hace un año estrenar ropa fue quizá más complicado, pero este 2021, ya con la vacunación en marcha y con la esperanza global del final de la pandemia (aunque con la amenaza de la variante ómicron), los colombianos se pudieron volver a dar cita en centros comerciales, calles de venta de textiles y centros de acopio, para escoger las prendas con las que celebrarán el nacimiento de Jesús y el tránsito al nuevo año.
En Bogotá, por ejemplo, el famoso “Madrugón” de San Victorino suele ser el lugar y evento preferido para comprar una buena pinta para las fiestas. Allí, los precios pueden llegar a ser considerablemente menores a los de los almacenes de marca o tiendas barriales y se puede conseguir todo lo que se pueda llegar a imaginar en materia textil, accesorios, juguetes y regalos.
No obstante, entre los colombianos existe un debate relacionado con el “estrén”, que tiene que ver principalmente con la hora a la que este debe ser expuesto al público. Mientras una gran mayoría opina que después de las cinco es una hora perfecta para estrenar, también hay quienes prefieren bañarse desde muy temprano para andar el día entero con su ropa nueva.
Otros, literalmente señalan que la mejor forma de aprovechar el “estrén” es usarlo desde muy temprano y hasta para ir a la tienda a hacer compras, mientras otros osados se esperaron hasta esta fecha para ir a comprarlo (lo cual puede ser una auténtica locura teniendo en cuenta los trancones y lo llenos que permanecen los sitios comerciales en estas fechas).
Finalmente, cómo dejarlos atrás, existe otro grupo de personas que literalmente prefiere el licor sobre el “estrén” y vestir una muda normal siempre y cuando no falte el ron o un buen aguardiente sobre la mesa. Es cuestión de gustos, como dicen por ahí.
Sea como sea, sin “estrén” o con él, usándolo temprano o desde la tarde, lo verdaderamente importante el 24 de diciembre es disfrutar un tiempo en familia, sobre todo después de unos años tan duros como los que han llegado con la pandemia. Siempre será interesante, por otro lado, ver cómo los colombianos tienen su propia forma de disfrutar de las tradiciones y las épocas decembrinas ¿Y usted, cómo las vive?