El ex presidente de la Corte Suprema de Justicia, Augusto Ibáñez, era el candidato idóneo para competir por Colombia por el cupo latinoamericano en la Corte Penal Internacional. Muy vinculado a este tribunal, Ibáñez incluso participó en representación de Colombia, nombrado por el gobierno Pastrana, en la redacción del Estatuto de Roma que le dio origen a la Corte Penal Internacional. Santos quería que Colombia lograra ese reconocimiento y le ofreció la postulación a Ibáñez, recién empezado su gobierno. La canciller María Ángela Holguín alcanzó incluso a ofrecerle la nominación a Ibáñez y a Catalina Botero, quien es relatora de derechos humanos en la OEA. Sin embargo, se sabe que el presidente Uribe, quien tuvo serias discrepancias con Ibáñez en la Corte, hizo cuanto pudo para impedir su llegada a ese organismo. Y lo logró. Lo grave fue que su reemplazo, el ex constituyente Eduardo Cifuentes, fue ampliamente derrotado entre otras razones, por no ser penalista. Como se dice, estaba cantado. Pasaran unos cuantos años antes de que Colombia vuelva a tener una oportunidad en la CPI.
El fiasco de Cifuentes en la CPI
Vie, 23/12/2011 - 10:45
El ex presidente de la Corte Suprema de Justicia, Augusto Ibáñez, era el candidato idóneo para competir por Colombia por el cupo latinoamericano en la Corte Penal Internacional. Muy vinculado a est