La aurora boreal es un fenómeno que cada persona debe ver antes de morir. Es por eso que KienyKe.com le presents los mejores lugares del mundo para presenciar este magnífico milagro de la naturaleza.
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Como fenómeno natural, la aurora boreal es un evento luminoso que en la actualidad muchas personas buscan como destino turístico. Su nombre general es aurora polar y dependiendo del hemisferio recibe su nombre. Si se ubica en el sur, se llama aurora austral y de la que estamos hablando -norte-, es la aurora boreal, por eso se van a nombrar locaciones ubicadas en el norte del globo terráqueo.
Alaska: En la remota ciudad de Fairbanks, una de las más pobladas al interior de este frío país, las luces que se aprecian en las termales desde el el mes de septiembre y marzo, son el lugar perfecto para descansar y apreciar esta maravilla de la naturaleza. Incluso, el New York Times denominó este lugar como todo un show del frío
Finlandia: este país europeo y nórdico, que al oriente limita con Rusia y que, exactamente, en la región llamada Laponia Finesa, tiene el río Paatsjoki o Pasvikelva, sobre el puente Nellim en la frontera de ambos países, las personas se organizan para observar este fenómeno de radiación cósmica. Asimismo, la ciudad Muonio, en la misma región, a pesar de no ser un famoso punto turístico, está cerca a las colinas y montañas del parque Pallas-Yllastuntri.
Noruega: este país al norte del viejo continente, tiene dos puntos claves, el primero es Unstad; esta región ártica permite practicar surfeo -puede sonar como una idea loca pero es bastante apetecida-, que también es disponible en las islas Lofoten, surfing y aurora boreal.
Por otro lado está Tromso, una ciudad que limita con el océano ártico al norte, que en invierno, al estar tanto tiempo en oscuridad, se vuelve en el escenario indicado para ver las luces del norte.
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Wikimedia[/caption]
Escocia: el parque nacional Cairngorms con su cadena montañosa sobre la parte más septentrional de toda Gran Bretaña es un escenario perfecto. Al llegar el invierno, el cielo oscuro, como se le conoce, es buscado para experimentar y ver la aurora boreal. También, las Islas Shetland, son una buena opción para observar este fenómeno
Groenlandia: en esta gran isla administrada por Dinamarca se encuentra Kangerlussuaq, esta población contiene un único aeropuerto internacional en la isla lo que permite la entrada al resto del territorio. Se ofrecen paseos en trineo para al mismo tiempo observar la aurora boreal.
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Canadá: como otra opción en el continente americano, en su país más boreal, Yellowknife es la ciudad más poblada de los territorios del noroeste del país. Aquí es donde se extraen los diamantes más puros en el mundo. Cerca al poblado, encontrará Aurora Village, acomodado para observar la aurora boreal, en tipis -una carpa o vivienda de estilo nómada propio de la región-, donde encontrará sillas climatizadas que combaten el brusco y gélido clima.
Suecia: en el norte extremo de este país, en la región de Laponia, los amplios prados y lagunas -además de la casi nula contaminación-, es uno de los escenarios más populares en Europa para conocer por primera vez las luces del norte.
Las mejores locaciones
Islandia: Este país en su totalidad es una locación perfecta para presenciar la aurora boreal, sobre todo si se llega a los limites del norte de la isla, cuando naturalmente se está más cerca del polo norte. En lugares como Jökulsárlón, que es el lago glaciar más grande de todo el país, ubicado en el parque nacional Vatnajökull, se aprecia el reflejo de las luces del norte sobre el agua de las lagunas que hacen que todo se vuelva un espectáculo inolvidable.Alaska: En la remota ciudad de Fairbanks, una de las más pobladas al interior de este frío país, las luces que se aprecian en las termales desde el el mes de septiembre y marzo, son el lugar perfecto para descansar y apreciar esta maravilla de la naturaleza. Incluso, el New York Times denominó este lugar como todo un show del frío
Finlandia: este país europeo y nórdico, que al oriente limita con Rusia y que, exactamente, en la región llamada Laponia Finesa, tiene el río Paatsjoki o Pasvikelva, sobre el puente Nellim en la frontera de ambos países, las personas se organizan para observar este fenómeno de radiación cósmica. Asimismo, la ciudad Muonio, en la misma región, a pesar de no ser un famoso punto turístico, está cerca a las colinas y montañas del parque Pallas-Yllastuntri.
Noruega: este país al norte del viejo continente, tiene dos puntos claves, el primero es Unstad; esta región ártica permite practicar surfeo -puede sonar como una idea loca pero es bastante apetecida-, que también es disponible en las islas Lofoten, surfing y aurora boreal.
Por otro lado está Tromso, una ciudad que limita con el océano ártico al norte, que en invierno, al estar tanto tiempo en oscuridad, se vuelve en el escenario indicado para ver las luces del norte.
[caption id="attachment_784757" align="alignnone" width="1024"] Wikimedia[/caption]
Escocia: el parque nacional Cairngorms con su cadena montañosa sobre la parte más septentrional de toda Gran Bretaña es un escenario perfecto. Al llegar el invierno, el cielo oscuro, como se le conoce, es buscado para experimentar y ver la aurora boreal. También, las Islas Shetland, son una buena opción para observar este fenómeno
Groenlandia: en esta gran isla administrada por Dinamarca se encuentra Kangerlussuaq, esta población contiene un único aeropuerto internacional en la isla lo que permite la entrada al resto del territorio. Se ofrecen paseos en trineo para al mismo tiempo observar la aurora boreal.
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Canadá: como otra opción en el continente americano, en su país más boreal, Yellowknife es la ciudad más poblada de los territorios del noroeste del país. Aquí es donde se extraen los diamantes más puros en el mundo. Cerca al poblado, encontrará Aurora Village, acomodado para observar la aurora boreal, en tipis -una carpa o vivienda de estilo nómada propio de la región-, donde encontrará sillas climatizadas que combaten el brusco y gélido clima.
Suecia: en el norte extremo de este país, en la región de Laponia, los amplios prados y lagunas -además de la casi nula contaminación-, es uno de los escenarios más populares en Europa para conocer por primera vez las luces del norte.
