Con la declaración de Emergencia Sanitaria en Colombia, muchos sectores han presentado dificultades económicas y sociales para continuar prestando sus servicios en medio de la cuarentena por Covid-19. Uno de los más afectados sin duda es el educativo, porque tuvo que migrar todos sus procesos de enseñanza a plataformas digitales.
Por esta razón, la Asociación Colombiana de Universidades (Ascun) le envió una carta a la alcaldesa de Bogotá Claudia López firmada por 35 Instituciones de Educación Superior (IES) públicas y privadas, donde proponen que en el Plan de Desarrollo y en el presupuesto para el segundo semestre del 2020 les sea otorgado un auxilio económico que les permita sobrellevar la situación.
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"El total de los recursos para este apoyo a estudiantes es de $ 755.042'370.379 (setecientos cincuenta y cinco mil cuarenta y dos millones, trecientos setenta mil trecientos setenta y nueve de pesos)", mencionó la asociación en un comunicado.
Las directivas de las Universidades advierten que dejar de invertir educación en esta crisis de salud, económica y social, es un retroceso en la economía y el desarrollo de esta ciudad que actualmente 122.000 estudiantes de estratos 1 y 2 estudian en IES públicas y 368.000 en IES privadas.
La mayoría de las instituciones han tenido que bajar los costos de matrícula porque en esta coyuntura las familias no cuentan con el dinero necesario para solventar los gastos del hogar, alimentación y educación, sin embargo, son conscientes de que los padres tomarán la difícil decisión de suspender las carreras de sus hijos el próximo semestre.
Además de la cuestión económica de la familias por el incremento del desempleo, al hecho se adicionan las quejas de miles estudiantes que aseguran que con el método de enseñanza virtual no están adquiriendo un conocimiento que justifique el pago de un semestre de más de $2'000.000.
La asociación recalca que el riesgo que se corre con la emergencia es el aumento de las brechas y la desigualdad, además la supervivencia de las universidades privadas y su aporte a la economía local, ante la baja de costos educativos que radican entre el 23 y el 25%, para el segundo semestre.