
El jefe de despacho de la Presidencia, Alfredo Saade, anunció este miércoles 9 de julio a través de su cuenta de X que el Gobierno colombiano está listo para firmar con Portugal el convenio que busca implementar un nuevo modelo de expedición de pasaportes. “Estamos listos para firmar con Portugal. Luego de reuniones técnicas, todo está acordado”, escribió.
Sin embargo, el anuncio de Saade contrasta con lo expresado por otras entidades clave. La Procuraduría General de la Nación, la saliente canciller Laura Sarabia e incluso el propio Gobierno de Portugal han señalado que aún existen obstáculos técnicos, legales y presupuestales que impiden avanzar hacia la firma definitiva del convenio.
La Procuraduría, en particular, ha sido enfática en señalar que la Imprenta Nacional no está en capacidad de asumir la impresión de pasaportes a partir del 1 de septiembre de 2025, fecha en que se termina la prórroga del contrato con Thomas Greg & Sons. Por ello, ordenó dos inspecciones preventivas a la Cancillería y a la Imprenta Nacional para evaluar la viabilidad del proceso.
De hecho, altas fuentes de la Procuraduría señalaron a este medio que el concepto que se presentará al procurador Gregorio Eljach estará orientado a advertir que “la Imprenta Nacional no tiene la capacidad para imprimir el documento desde el 1 de septiembre”.
A nivel disciplinario, la Sala Disciplinaria de Instrucción ya inició acciones por las presuntas fallas cometidas por los excancilleres Laura Sarabia y Luis Gilberto Murillo, así como por el propio Alfredo Saade, que de comprobarse podrían derivar en sanciones e inhabilidades.
En medio de esta controversia, Laura Sarabia —quien renunció recientemente al cargo de canciller— había solicitado una visita administrativa a la Cancillería el pasado 5 de marzo, con el objetivo de “garantizar la transparencia, legalidad y correcta ejecución de este proceso”.
Desde esa entidad también reiteraron: “Desde la Cancillería reiteramos nuestro compromiso con el fortalecimiento institucional y la contratación pública transparente. Brindaremos toda la colaboración requerida y atenderemos debidamente todos los requerimientos del Ministerio Público en el marco de esta actuación preventiva”.
Además, el 7 de julio, Sarabia envió una carta al procurador Gregorio Eljach en la que detalla los avances y reuniones sostenidas con el Gobierno portugués, así como los posibles escenarios para asegurar la continuidad del servicio de expedición de pasaportes. “En atención a lo informado en la diligencia de vigilancia preventiva que se adelantó hoy en las instalaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores, en relación con la implementación del nuevo modelo de expedición de libretas de pasaportes y documentos de viaje, desde esta cartera nos permitimos presentar las gestiones realizadas durante los últimos cinco (5) meses, así como los tres (3) posibles escenarios que podrían desarrollarse para garantizar la continuidad de la prestación del servicio”, dice el documento.
Por su parte, la Embajada de Portugal en Colombia también se pronunció en una carta fechada el 26 de junio. Allí confirmaron que, aunque los términos del acuerdo comercial fueron aprobados el 26 de febrero de 2025, hubo retrasos y posteriormente reservas del nuevo equipo de la Cancillería, lo que ha impedido avanzar con la firma.
“El 26 de febrero de 2025, el Gobierno de Portugal aprobó los términos del mencionado acuerdo comercial mediante su publicación en el diario oficial, aunque con un retraso de dos meses respecto al plan inicialmente previsto”, señala el documento.
Agregan que, tras reuniones en Bogotá entre el 6 y el 7 de marzo, se plantearon dos preocupaciones clave: “(i) el marco legal debía ser un convenio interadministrativo internacional; (ii) se debía prever la asignación de presupuestos futuros para el periodo total de los 10 años del contrato”.
Los trabajos, que estaban avanzando entre las partes, se suspendieron en mayo. Portugal lamentó que “solo hemos sido convocados para aclarar dudas. A la fecha, no tenemos conocimiento, ni hemos sido involucrados en discusiones de naturaleza más estratégica”.
La delegación portuguesa también advirtió sobre la urgencia de definir la situación: “Se hace necesario que el Gobierno de Colombia nos indique una estimación de fecha en la cual se puedan reunir las condiciones necesarias para la firma del convenio interadministrativo internacional, así como si pretenden mantener la marca de agua y los diseños aprobados por el equipo anterior (salvo pequeños ajustes que no alteren estructuralmente los mismos)”.
Así las cosas, mientras el alto gobierno afirma estar listo para la firma, tanto el ente de control como el país europeo mantienen dudas sobre la capacidad operativa y jurídica para avanzar en este nuevo modelo de pasaportes, cuyo desarrollo ha estado marcado por retrasos, controversias y salidas ministeriales.