
La polémica y explosiva Yina Calderón, una de las participantes más comentadas de La Casa de los Famosos Colombia, habló con Kienyke.com sobre su paso por el reality, su lucha contra los biopolímeros, los choques con algunos participantes, la controversia con Epa Colombia y las denuncias en su contra por una finca.
Una batalla contra los biopolímeros
Yina llegó a la competencia enfrentando un reto personal enorme: es paciente afectada por biopolímeros, sustancias que le han causado daños en tejidos que requirieron varias intervenciones quirúrgicas. "Me quedó una bolita que causaba inflamación, y el estrés, la alimentación, todo hizo que se dañara el tejido y tuve que operarme", contó.
Aunque logró controlar el dolor con ayuda del equipo médico del canal, finalmente tuvo que salir para una cirugía que, según ella, fue una liberación: "Gracias a Dios me sacaron todo lo malo y siento que en la próxima resonancia ya voy a estar limpia totalmente".
Irónicamente, este problema surgió justo en medio de la competencia, pero la también empresaria se tomó su eliminación con humor: "Era la más salada, pero así es la vida. Ya había dado todo, tenía que salir, y el tiempo de Dios es perfecto".
Sobre su paso por el programa, la exparticipante confesó que entró sabiendo que ese era su papel. "No me contrataron para ir a dormir ni a hacer amigos, sino para ser polémica, explosiva, la villana. Yo fui yo, di lo que tenía que dar." Reconoce que dentro de la casa jugó el rol de la “mala”, aquella que genera reacciones encontradas en el público —risa, ternura, rabia— y que no tenía la intención de ganar, sino de entretener.
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Llegó hasta la semana 18, mucho más de lo que esperaba, y salió tranquila, convencida de haber cumplido su misión: "Yo ya cumplí con mi trabajo."
¿Cómo fue su relación con los otros participantes?
Yina no esquivó los conflictos, especialmente con algunas personas dentro y fuera del reality. Con Karina García por ejemplo, mantuvo una relación complicada: "Había cosas en ella que no me gustaban, como su victimización constante frente a cámaras. Yo la defendí mucho al principio, pero llegó un punto donde exploté." Aunque reconoce que Karina fue leal, su choque de personalidades fue irreconciliable.
Con Melissa Gate, la relación fue un vaivén. Tras muchas peleas iniciales, especialmente cuando Melisa salió del país, la tensión se relajó y ahora mantienen un vínculo cordial. "Ya no doy para pelear con Melisa, se cerró ese ciclo", dijo.
Sobre otros compañeros, Gina admite que no mantiene amistad con varios de ellos, prefiere estar en su mundo, tranquila con su familia y pocas amistades cercanas. "Soy una vieja solitaria", afirmó.
Aunque su esencia permanece intacta, reconoce que salió más controlada y menos grosera, con un vocabulario más refinado y aprendiendo a manejar mejor sus explosiones. "Aprendí que no se puede pelear con todo el mundo y que hay que tener un equilibrio", manifestó en Kienyke.com.
Confesó que para futuros realities se cuidaría más de no formar alianzas visibles que puedan herir a la audiencia y manejaría mejor su lenguaje para no ser tan hiriente, sin perder su esencia.
Sus favoritos para ganar y el cierre de un ciclo
Gina apuesta por sus amigos del reality para ganar: Melissa, Emiro y Camilo. Los respeta por su autenticidad y trayectoria en el juego. Sobre ellos dijo: “Quiero que gane alguien que haya estado desde el principio, no quien entró a mitad del juego".
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“No puedo estar de fiesta si mi amiga está en la cárcel”
Calderón también habló sin filtros sobre su estado de salud, la polémica por la supuesta deuda de una finca, y sobre todo, del duro momento que vive con su amiga Daneidy Barrera, más conocida como Epa Colombia.
"Yo salí feliz de la casa por lo que mostré como personaje, pero no feliz de verdad. Salí enferma de una cirugía plástica y con el corazón roto por lo de mi amiga. ¿Cómo voy a estar de rumba si ella está en la cárcel?", confesó Gina con la voz entrecortada.
Contó que durante el reality sospechaba que algo no andaba bien, pero jamás imaginó que Epa estuviera privada de la libertad: “Yo le hablaba a las cámaras, ‘amiga, amiga’, pero pensaba que no venía a verme por algún motivo. Nunca imaginé esto”. Ahora, espera reencontrarse con ella esta semana con un permiso especial.
Además, respondió a la denuncia de un hombre que la acusa de no pagar una finca: “Eso es falso. Hubo un intercambio y todo quedó claro. No hay demanda, no hay proceso, y lo que creo es que quiere hacer bulla para levantar su marca de esmaltes”.
Yina señaló que ya tiene abogado y espera que el señor se retracte, sobre todo por respeto a su familia. “A mí no me importa tanto mi imagen, pero mi papá está muy bravo. Esto ya no es un chisme, es una falta de respeto”.
Por ahora, su meta es clara: seguir visibilizando a Epa Colombia y no dejar que el país la olvide. “Ella ya pagó, ya ha aportado, y para Colombia no es una mala mujer. Solo está exageradamente juzgada”.