Paquita la del Barrio, la icónica cantante mexicana, no solo dejó un legado musical lleno de éxitos y frases inolvidables, sino también una deuda que está dando mucho de qué hablar después de su fallecimiento. Aunque en redes y medios se habló de que Paquita tenía casi 10 millones de dólares en una cuenta bancaria y varios restaurantes a su nombre, esta información sigue siendo especulativa porque ninguna fuente oficial ha confirmado o desmentido esas cifras.
Lo que sí se sabe, gracias a una entrevista que dio su mánager Francisco Torres en el programa Ventaneando, es que Paquita enfrentaba un problema serio con Hacienda. Para cubrir sus deudas fiscales, la cantante pidió un préstamo que nunca terminó de pagar completamente. Según contó Torres, ese préstamo fue facilitado por la disquera Musart, con quien Paquita tenía un acuerdo: le prestaron una fuerte suma para que pudiera pagar sus impuestos, pero a cambio empezaron a descontarle ese dinero directamente de las regalías que generaba como cantante.
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Lo curioso, y un poco triste, es que Paquita muchas veces se quejaba y decía que la estaban “robando” o que alguien le hacía fraude, pero no terminaba de entender que esas deducciones eran para cubrir una deuda que ella misma tenía con el fisco. “Ella no comprendía del todo que tenía una obligación pendiente”, explicó su mánager.
Sobre el monto de esa deuda, se estima que ronda los 1.5 millones de pesos mexicanos, que al cambio serían unos 400 millones de pesos colombianos.
Además, Francisco Torres reveló otro dato importante: Paquita nunca incluyó en su testamento las regalías generadas por su música. Él le insistió en que debía hacerlo, que tenía que dejar claro a quiénes iban a pertenecer esas regalías para que sus hijos pudieran manejar ese legado. Pero la cantante nunca lo hizo. Por eso, las regalías que siguen entrando por sus canciones no están oficialmente asignadas a sus herederos.
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Esta situación pone a los hijos de Paquita en una posición complicada. Aunque son ellos quienes heredaron la fortuna, deberán hacerse responsables de la deuda con la disquera Musart, ya que las regalías como intérprete no están contempladas en el testamento. En otras palabras, sus hijos tendrán que cubrir ese hueco económico si quieren mantener el legado musical y financiero de Paquita.
Así, mientras la familia sigue enfrentando el duelo por la pérdida, también deben lidiar con esta carga económica que dejó la cantante.
